Hermes Solano
En agosto del año pasado, Carlos Alvarado firmó la ley de Nómadas Digitales, pero hasta este 4 de julio entrará a regir, con la firma del reglamento.
Rodrigo Chaves realizó el acto este lunes en Casa Presidencial, con la presencia de varias autoridades de Gobierno.
“Se aprobó en julio de 2021 y después se puso a dormir el sueño de los justos. En tres semanas hicimos lo que no se hizo en nueve meses”, dijo Chaves.
Según el presidente, cada una de las personas que vengan a Costa Rica a trabajar, generará 15 millones de colones por semestre al país.
“Me parece que fue una ley visionaria, que se adelanta a los tiempos”, añadió el mandatario durante el acto de la firma del reglamento.
El objetivo de esta ley es que los nómadas digitales contribuyan a la recuperación turística por medio del alojamiento, alimentación, alquiler de vehículos, tours, servicios médicos, salones de belleza y hasta servicios educativos.
En la firma estuvieron presentes además el exdiputado Carlos Ricardo Benavides, quien fue el que propuso e impulsó el proyecto. También estuvieron varios representantes de las cámaras y actuales diputados de la República.
“Hoy es un día especial para Costa Rica, en el que le devolvemos la fe en muchos aspectos”, dijo William Rodríguez, ministro de Turismo.
Por su parte, Rubén Acon, presidente de la Cámara Costarricense de Turismo (Canatur), dijo que en el proceso de esta ley y principalmente en la reglamentación, hubo un estira y encoge entre varios sectores.
OBSERVE MÁS: Gobierno promete terminar borrador de reglamento para nómadas digitales la próxima semana
¿Qué permite la ley?
Nómadas Digitales permitirá a toda persona extranjera que venga a Costa Rica con la intención de utilizar el país para realizar teletrabajo y que tenga un ingreso mayor a $3.000, permanecer hasta por un año con una visa que se puede prorrogar.
En caso de que decida viajar con la familia, el ingreso mensual debe ser de $5.000.
El equipo de cómputo, informático o de telecomunicaciones que porte el “nómada” para cumplir con sus labores o la prestación de sus servicios, estarán exonerados del pago de todos los impuestos.
Eso sí, siempre y cuando cumplan con los criterios de proporcionalidad dictados por la Dirección Nacional de Aduanas.
Además, los beneficiarios tendrán exención total sobre el impuesto sobre las utilidades, que no aplica a su grupo familiar.
