Juan Pablo Arias
La empresa Ad Astra Rocket Company, liderada por el exastronauta costarricense Franklin Chang, anunció la firma de dos contratos significativos con la NASA, para brindar su apoyo en el desarrollo de la tecnología del motor de plasma que desarrolla, conocido como Vasimr.
Los contratos suscritos se centran en dos innovaciones clave incorporadas por Ad Astra en el diseño del sistema de alta potencia de ondas de radiofrecuencia del motor, según un hecho relevante divulgado al mercado bursátil el pasado 4 de agosto.
Dichas innovaciones facilitan la entrega más eficiente de energía en forma de ondas electromagnéticas al plasma del motor, involucran avances en materiales, diseño y fabricación del sistema de radiofrecuencia, lo que les permite hacer frente a las desafiantes temperaturas presentes en el interior del motor.
Además, el nuevo diseño brindaría un aislamiento mejorado a las bobinas superconductoras de ultra baja temperatura.
El primer contrato, que fue adjudicado a finales del mes de junio, tiene como objetivo la fabricación de un nuevo acoplador de radiofrecuencia para la segunda etapa del motor de plasma.
Este acoplador fue conceptualizado con resultados prometedores en un previo acuerdo con la NASA en el año 2022. Una vez que el nuevo acoplador sea producido, se procederá a su integración y pruebas en el prototipo VX-200SS Vasimr en las instalaciones de Ad Astra, ubicadas en el estado de Texas, Estados Unidos.
En el segundo contrato, adjudicado el 3 de agosto, se especificó que Ad Astra probará un diseño innovador del segmento de alta corriente de la línea de transmisión de radiofrecuencia que entrega la potencia al acoplador.
“Al igual que el propio acoplador, el segmento de alta corriente de la línea de transmisión también opera en el duro entorno del interior del motor. La innovación de su diseño mejora la gestión térmica, aumentando la su eficiencia y reduciendo su peso”, señala el comunicado.
Chang destacó en la misiva que la implementación lo que permitiría alcanzar una potencia de más de 100 kW en operación continua, superando así nuestro récord actual de 80 kW.
Estas mejoras tecnológicas son esenciales para alcanzar el ambicioso objetivo de Ad Astra de alcanzar un Nivel de Madurez Tecnológica (TRL) de 5, lo que se espera lograr para mediados del año 2024.
