Hermes Solano
Las fracciones legislativas de Liberación Nacional y el Frente Amplio solicitaron a la Contraloría General de la República abrir una investigación respecto al proceso de contratación que hizo la Caja Costarricense de Seguro Social para solventar la crisis de horas extras de los médicos especialistas.
Este proceso se abrió en plena Semana Santa y en medio de dudas respecto al trámite y el tiempo para ofertar. Esto porque se aplicó el llamado “procedimiento de emergencia”.
La solicitud liberacionista ante la Contraloría se basa en las normas de la Ley General de Contratación Pública y su reglamento, los cuales señalan que un procedimiento de emergencia es aplicable ante una situación imprevisible.
Los verdiblancos consideran que había criterios de la Dirección Jurídica de la Caja donde evidenciaban que el escenario que se vive en este momento, donde los especialistas no están haciendo horas extras por el tema salarial, era previsible.
“Es fundamental que se esclarezcan estas investigaciones para garantizar la transparencia en los procesos de contratación pública y asegurar el adecuado uso de los recursos del Estado en beneficio de la ciudadanía”, señaló la diputada Monserrat Ruiz.
“Esperamos que la Contraloría General de la República realice una investigación exhaustiva y que, de encontrarse irregularidades, se tomen las medidas correspondientes”, añadió.
Fracción Legislativa del Partido Liberación Nacional. (Archivo/El Observador)
“Vicios de nulidad y conductas delictivas”
La bancada frenteamplista también pidió al ente contralor investigar lo sucedido, considerando que esa licitación de emergencia abierta por la Caja tendría vicios de nulidad y hasta “conductas delictivas”.
“Esa contratación que se realizó tiene serios cuestionamientos. Se hizo bajo una figura que no era la indicada, según lo dijo el departamento jurídico”, mencionó el legislador Ariel Robles.
El diputado cree que los montos que se pagarán por medio de esta contratación son más elevados que llegar a un acuerdo con los médicos especialistas, negociaciones que se han venido dando desde el pasado 1 de abril.
En plena Semana Santa la CCSS corrió para tener un “Plan B”, consistente en contratar los servicios privados de salud.
La previsión es que al no tener profesionales disponibles habría un “un riesgo a la continuidad de los servicios de salud que presta la CCSS, de lunes a jueves de 4 pm a 7 a.m., los viernes de 3 pm a 7 am y las 24 horas los sábados, domingos y feriados”.
El proceso corrió el Martes Santo. Primero se hizo una invitación a 15 proveedores y luego se habilitó la recepción de ofertas, a la cual tuvieron que darle dos prórrogas.
A primera hora del miércoles se conoció que 10 empresas ofrecieron sus servicios. De ellas, la mitad pasaron el filtro de requisitos y para el sábado se esperaba dejar las contrataciones en firme.
Todo el proceso se fue siguiendo en el Sistema Integrado de Compras Públicas (SICOP), donde ahora aparecen como adjudicadas en firme las contrataciones con esas mismas 5 firmas que pasaron por la revisión inicial.
Se trata de las firmas Mediluke S.A., Raque S.A., Asociación de Servicios Médicos Costarricenses, Hospital Universitario Unibe S.A. y el Instituto Centroamericano de Medicina I.C.E.M S.A.
