Rodrigo Díaz
La Cámara Costarricense de Restaurantes y Afines (Cacore) solicitó al Gobierno postergar la exigencia del certificado de vacunación hasta después de que finalice la temporada alta; es decir, hasta después de marzo del 2022.
La solicitud se dio a conocer luego de que el viernes anterior el Gobierno anunció extender, por un mes, este requisito, previsto inicialmente para arrancar en diciembre de este año.
La medida consiste en la presentación de un certificado electrónico, bajo el formato de código QR, para poder ingresar a los comercios y negocios. En este caso, el establecimiento podrá funcionar a un 100% de su aforo a partir del 1 de diciembre, si implementa la exigencia de presentar el certificado a sus clientes.
No obstante, los negocios pueden optar por un período de transición, el cual finaliza el 7 de enero de 2022. Este consiste en mantener un aforo del 50% y no exigir el certificado a sus clientes.
A partir del 8 de enero sí deberán implementar la obligatoriedad de presentar el código QR para ingresar.
Por su parte, el presidente Carlos Alvarado dijo que este martes se anunciarán nuevos ajustes al procedimiento del certificado, aunque no aclaró si se harían más extensiones de plazo.
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No afectar temporada alta
La solicitud de los dueños de restaurantes se basa en evitar la afectación durante los meses de temporada alta (diciembre 2021 a marzo 2022).
Nuevamente, reclamaron que no se les tomó en cuenta para estas decisiones a pesar de que sus representados se han comportado “de manera empática y solidaria, cumpliendo con todas las directrices y restricciones sanitarias, así como con estrictos protocolos covid19”.
Insistieron en que el certificado de vacunación mediante un código QR, no debe convertirse en un obstáculo para la reactivación económica, “y mucho menos durante la temporada alta del turismo nacional y extranjero”.
Cacore insistió que el sector de restaurantes es uno de los más afectados.
Además, señalaron que quedan en el aire temas como la redefinición del distanciamiento social para volver al 100% de aforo. Además, cómo se haría la supervisión de turistas y menores de edad, y cómo las Pymes pueden enfrentar el costo de contratar personal exclusivamente para fiscalizar clientes.
La petición de Cacore se une a la de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur), que la semana pasada expuso su rechazo a las medidas, ya que tendrá severos efectos para el sector por la llegada de la temporada alta.
Rodrigo Díaz
