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El micro hábito que potenciará su proceso de innovación personal

Natalia C. Alfaro para El Observador No me cansaré de decir que si los seres humanos son incapaces de innovar…

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El micro hábito que potenciará su proceso de innovación personal
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Natalia C. Alfaro para El Observador

No me cansaré de decir que si los seres humanos son incapaces de innovar en su vida, no tiene caso que tengamos empresas brutalmente innovadoras y de alta tecnología.

En mi artículo anterior innovando desde el ser les compartí 2 técnicas sobre cómo conectar con los medios creativos. Así que hoy quiero comentarles acerca de un micro hábito que potenciará su proceso de innovación personal.

Tras procesar todos los insumos de las fuentes de conocimiento más importantes en mi vida como lo son: espiritual, negocios, tecnología, desarrollo personal y psicología.

Además de un posterior sinnúmero de aciertos y desaciertos es que puedo decirles que el micro hábito que les ayudará a potenciar su proceso de innovación personal es el de agendar tiempo con ustedes mismos

Para reflexionar

Todos contamos con las mismas 24 horas en el día, y normalmente, estamos llenos de compromisos laborales, familiares, sociales y deportivos (póngale el nombre que mejor les parezca).

Para su mayoría contamos con un espacio agendado que hay que respetar. De ser así: ¿por qué entonces no hacemos lo mismo con nuestro espacio de pensamiento individual? 

Y a mi no me digan que es que no tienen tiempo, porque si no tiene al menos de 15 a 30 minutos para llevar nuestra mente hacia otro lado, para agradecer, reflexionar o autofelicitarse lamento decírselo. Pero usted tiene problemas de planificación y productividad.

Actualmente hasta nuestro calendario del email tiene un reconocimiento de patrones y es capaz de predecir semanalmente cuáles son las horas de menor actividad para recomendarle espacios libres para pensar. 

Debo confesar que estos espacios al principio para mi fueron poco provechosos, porque luego que vencí al monstruo de “no tengo tiempo” lograba agendar pero para perder el tiempo revisando redes sociales.

Luego entendí que ocupaba un poco más de sistematización en ese espacio conmigo misma así que me di la tarea de cada día identificar una impronta que limitaba mi potencial y los fui anotando en una libreta; cuando me sentía de humor los analizaba un poco en detalle y cuando no simplemente lo escribía e iba formando un listado de cosas.

Después identifiqué que muchos de esos sellos mentales estaban correlacionados, y eran transversales en diversas áreas de mi vida, por tanto los fui cambiando por un análogo positivo y como consecuencia, el proceso de reinvención empieza a florecer. Posterior a que se genera este nuevo hábito, el cuestionamiento como cuando éramos niños regresa; inicia el despertar nuevamente hacia la atención plena, autocontrol y de repente tu rutina se altera. 

Por ejemplo, no le parece suficiente las funcionalidades que tienen los asistentes virtuales como Alexa o Google home.

Tampoco le parece correcto la forma en que está acomodado los anaqueles en el supermercado, la atención al cliente de su tienda física favorita no es tan maravillosa, nota procesos de compra digitales complicados, ve cómo en su empresa los procesos hacen que las personas les tome el triple del tiempo hacer su trabajo.

Pero el momento más impresionante es cuando usted vuelve sus ojos a su ser interior, nota e identifica claramente todas las cosas aún por mejorar, por aprender y que usted es capaz de suplir sus propias necesidades y las de otras personas con elementos de valor al poder convertir ruinas en obras de arte.

Allí es donde inicia el verdadero proceso de innovación personal; en mi próximo artículo les hablaré sobre las diferentes etapas que conlleva.