Sergio Arce
Si usted es de las personas que suele compartir mucha información personal en sus redes sociales, mejor piénselo dos veces en este 2022. Es importante que tome en cuenta las repercusiones en materia de seguridad.
Los cibercriminales buscan víctimas expuestas, es decir, personas que comparten información sensible como: direcciones, números de teléfono, datos de cuentas bancarias e información de pagos de salarios.
También identifican a quienes ofrecen en sus redes sociales detalles que para muchos podrían parecer inofensivos como fotografías de la vivienda, de menores de edad y la activación de la ubicación GPS de su dispositivo electrónico.
Según datos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en el 2020 se recibieron 17.457 denuncias por delitos informáticos. Esto representó un crecimiento del 24% con respecto al 2019.
¡Preste atención!
Una de las tácticas más comunes que utilizan los ciberdelincuentes es el phishing, de acuerdo con expertos de la firma Eulen Seguridad Costa Rica.
Este delito consiste en el envío de correos electrónicos o mensajes que tienen la apariencia de proceder de fuentes de confianza, con los que solicitan información confidencial del receptor.
Fernando Gamboa, asesor ejecutivo y experto en seguridad de Eulen, “los ciberdelincuentes juegan con la emoción de los usuarios. Por ejemplo, les indican que han sido ganadores de premios atractivos y les solicitan la información personal.
“Al mismo tiempo pueden incluso estar descargando un virus malicioso en el dispositivo para seguir filtrando información”, dijo.
Pero no solo eso. Los ciberdelincuentes utilizan el contenido que encuentran en las redes sociales e Internet para su beneficio.
Las imágenes de familiares, menores de edad e inmuebles son aprovechadas para realizar otros tipos de actividades delictivas como: delitos contra la propiedad, pornografía infantil, extorsión y servicios sexuales, secuestros y paseos millonarios.
Un control positivo
Eulen lanzó diferentes recomendaciones básicas para hacer un buen uso de la información que se publica en la web:
- Cuando una persona abre un perfil en una red social puede elegir entre una cuenta pública o privada. Al seleccionar una cuenta privada se tiene más control de las personas que pueden ver la información publicada. Si se elige una cuenta pública, es recomendable limitar el tipo de contenidos y datos como localización, ya que es de acceso libre para todas las personas.
- Es fundamental analizar la información que se va a publicar, de manera que esta no pueda ser utilizada para generar un daño, tanto al usuario, como a sus familiares y amigos. Al hacerse pública puede caer en manos de cualquier persona.
- Si se reciben mensajes o solicitudes, se recomienda hacer un análisis del contenido. Ante la mínima sospecha opte por eliminarlo.
