AFP
(Ciudad de Guatemala). Guatemala completó este domingo siete días de protestas, mientras organizaciones campesinas anunciaron un “paro indefinido” para exigir la renuncia de la fiscal general, Consuelo Porras, a quien acusan de fraguar un “golpe de Estado” contra el presidente electo Bernardo Arévalo.
“En consenso hemos decidido fortalecer las acciones de protesta en el paro nacional indefinido en todos los territorios de Guatemala”, consignó el Comité de Desarrollo Campesino (Codeca), en la red social X, antes Twitter.
Codeca, una organización que también aglutina indígenas, adelantó que participará en el cierre de carreteras en 52 puntos en todos los departamentos del país.
En diferentes zonas de Guatemala el cierre de carreteras se mantuvo para exigir la salida de Porras, del fiscal Rafael Curruchiche y del juez Fredy Orellana, quienes han liderado cuestionados allanamientos al tribunal electoral y al partido Semilla de Arévalo
Ante el temor de un recrudecimiento de las protestas, este domingo los guatemaltecos se agolparon en supermercados que al final del día mostraban sus estantes vacíos.
En tanto, la Asociación Guatemalteca de Líneas Aéreas (AGLA) mediante un comunicado en la red social X, detalló que los proveedores de combustible de aviación “les informaron “sobre afectaciones a la cadena de suministro”.
El deficitario suministro de combustible, según AGLA, “pone en grave riesgo la continuidad de las operaciones de las aerolíneas de pasajeros y carga”.
Acciones contra protestas
La Corte de Constitucionalidad de Guatemala (CC) intentó el sábado sin éxito aplacar las protestas con una resolución que ordena garantizar la toma del poder de Arévalo, tras las elecciones generales disputadas en primera y segunda ronda, en junio y agosto pasado respectivamente.
Desde el triunfo de Arévalo, la fiscal general Porras promovió diferentes acciones judiciales para obstaculizar que asuma el poder el 14 de enero próximo.
Con su promesa de lucha anticorrupción, Arévalo, de 64 años, ganó sorpresivamente las elecciones en segunda vuelta el 20 de agosto ante la exprimera dama Sandra Torres, cercana a la poderosa élite empresarial aliada del gobierno.
Pero desde la primera ronda electoral, en junio, la fiscal general, apoyada por el jefe de la fiscalía contra la impunidad, Rafael Curruchiche, y del juez Fredy Orellana -los tres incluidos en una lista de dirigentes guatemaltecos “corruptos” y “antidemocráticos” elaborada por Estados Unidos- emprendieron una serie de acciones contra Arévalo y su partido político, Semilla.
Ante el cierre masivo de carreteras que conducen a las fronteras con México, El Salvador y Honduras, el comercio se ha visto afectado.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, al atender una solicitud del gobierno guatemalteco anunció el sábado la creación de una misión de “mediación y diálogo” con los sectores que mantienen las protestas.
