Paula Ruiz
Para el 2024, el 92% de la flota vehicular verá una disminución en el pago del marchamo, prometió el ministro de Hacienda, Nogui Acosta.
El jerarca aseguró que así se pretende mediante el proyecto de ley que están elaborando, el cual debe ser aprobado por la Asamblea Legislativa. No se informó en que momento se presentará la propuesta.
La disminución se producirá por el nuevo cálculo del impuesto a la propiedad.
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“Vamos a tener reducción en 92% de flota vehicular del país y solamente aquellos vehículos de alto valor van a tener que pagar poco más”, afirmó Acosta este miércoles en conferencia de prensa.
El ministro calculó que aquellos vehículos con valor fiscal por debajo de ¢12 millones, verán reducido el costo y “van a tener certeza de que va ir reduciéndose conforme va envejeciendo el vehículo”, dijo.
Esta es la iniciativa que desde noviembre anterior, el jerarca de Hacienda aseguró que enviaría al Congreso en enero de 2023, por lo que tiene un atraso de cuatro meses en esa gestión.
Para aplicar la rebaja, el cambio debe de aprobarse en la Asamblea Legislativa antes del inicio del cobro del derecho de circulación el 1 de noviembre. El Instituto Nacional de Seguros (INS) requiere de hacer las readecuaciones necesarias en sus sistemas para aplicar la disminución.
El presidente de la República, Rodrigo Chaves afirmó que se trata de “una promesa del ministro”, frente a la población y “solo los (carros) caros podrán ir para arriba (en el cobro)”.
Marchamo digital
El anuncio de Acosta se realizó durante el lanzamiento del proyecto “Marchamo Digital” que pretende colocar un chip en todos los vehículos, a cambio de eliminar los stickers de marchamo tradicionales.
De acuerdo con Mónica Araya, jerarca del Instituto Nacional de Seguros (INS), ya se invirtieron ¢600 millones en la plataforma y se pretende que su aplicación se realice a partir del marchamo del 2024, sin embargo dependerá de las licitaciones que se lanzarán en mayo.
De acuerdo con la información suministrada por Casa Presidencial, el chip tiene una tecnología RFID que permite la radiofrecuencia de objetos.
“La tecnología RFID es similar al código de barras, en el sentido de que los datos son capturados por una etiqueta, en este caso inteligente, que almacena la información en un chip que interactúa con un sistema integrador para orquestar los sistemas de servicios ciudadanos”, indicó el Gobierno.
“Eso significa que, a partir de la implementación del marchamo digital, los vehículos estarán identificados de manera única por medio de un chip que remitirá la información hacia un sistema informático centralizo, a su vez, esta información podrá ser leída a distancia por los equipos especiales de la Policía del Tránsito”, amplió.
El costo del chip sería de ¢2.000 cada 10 años, informó el gobierno.
La implementación sería por etapas y permitiría desde regular presas, hasta aplicar la restricción vehicular, añadieron los jerarcas.
El Gobierno pretende eliminar el sticker y colocar un chip en los vehículos. (Archivos)
