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PROTAGONISTAS 2022| Rodrigo Chaves, el desconocido que regresó a Costa Rica para gobernar

El 26 de noviembre del 2019, al filo del medio día, el entonces presidente Carlos Alvarado tomó juramento a su…

Por Berlioth Herrera

Tiempo de Lectura: 7 minutos
PROTAGONISTAS 2022| Rodrigo Chaves, el desconocido que regresó a Costa Rica para gobernar
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El 26 de noviembre del 2019, al filo del medio día, el entonces presidente Carlos Alvarado tomó juramento a su nuevo Ministro de Hacienda. Se sabía muy poco del nuevo jerarca

Rodrigo Alberto de Jesús Chaves Robles era un tico que había estado alejado del país durante los últimos 30 años, prácticamente un desconocido en el ambiente nacional.

Se sabía que venía de ocupar un alto cargo del Banco Mundial y que era graduado de Ohio State University, una universidad prestigiosa. Por ahí rondaban algunos rumores también. (Cuando el río suena…)

Su paso por el Ministerio de Hacienda sería fugaz pero sin duda, Chaves llegó para quedarse en la política nacional.

Solo 17 meses después de volver al país, ganó las elecciones presidenciales en segunda ronda y el 8 de mayo anterior asumió como el 49° Presidente de la República de Costa Rica.

El Observador ha elegido a Rodrigo Chaves Robles como el protagonista del 2022.

El Presidente histriónico, de los dichos, los personajes, las confrontaciones, sin miedo a mandar, liberal y populista.

Quienes más lo conocen cuentan además que es simpático, chistoso y astuto.

Visita del Presidente electo Rodrigo Chaves y su equipo, reunión con el Presidente de la República Carlos Alvarado Quesada, Casa Presidencial de Costa Rica. 18 abril 2022. Foto: Roberto Carlos Sánchez @rosanchezphoto

En Hacienda

Ese estilo de “el que manda soy yo” se comenzó a notar durante su corto paso por Hacienda. Llegó al Ministerio a señalar lo que creía que no estaba bien o a él no le gustaba.

Fue a una comparecencia al Congreso con su tono firme y que sonó a veces hasta burlesco para hablar de reformas económicas, ahí le mencionó a los diputados temas como la venta de instituciones públicas.

Siete meses después de asumir el cargo y recién recuperado de una apendicitis convocó a una conferencia de prensa urgente donde anunció su salida del Gobierno. No desaprovechó para criticar a su, hasta ese momento, jefe.

“Yo le pedí al Presidente que vetara la ley que liberó a las municipalidades de la regla fiscal. Le pedí un veto parcial en su artículo 11, pero él tomó una decisión diferente a mi recomendación técnica”, dijo y por eso presentó su renuncia. Claro, ahora como candidato y presidente de la República ha dicho que él no renunció sino que lo echaron.

Pero este no fue su único conflicto. Tuvo diferencias con el resto de los miembros del equipo económico de la Administración anterior y diferencias con el propio Alvarado, cuando propuso gravar los salarios superiores a ¢500.000 colones.

Rodrigo Chaves Pilar Cisneros

Rodrigo Chaves durante la campaña electora. (Foto Eyleen Vargas/Agencia Ojo por Ojo/El Observador)

¿Candidato presidencial?

Tras dejar el Gobierno, salió del ojo público, pero por poco tiempo.

Fue entonces cuando se comenzó a mencionar su nombre como un posible candidato presidencial ¿Con cuál partido? Bueno, eso parecía irrelevante y así ocurrió. Se dijo que habló con empresarios y negoció con el Republicano Socialcristiano.

Tiempo después (no mucho), se presentó como el candidato por el desconocido Partido Progreso Social Democrático (PSD).

Ni el partido, ni la candidatura prometían mucho hasta que se unió a su equipo la periodista y reconocida cara de la televisión nacional, Pilar Cisneros, que aunque ella ha insistido siempre en bajar el tono, fue la catapulta para la aspiración de Rodrigo Chaves.

En medio de la campaña, en octubre del 2021, el Banco Mundial publicó en su sitio web la resolución 649 del Tribunal Administrativo donde a Rodrigo Chaves se le sancionó por conductas inapropiadas de naturaleza sexual.

Había sido denunciado por dos jóvenes de presunto acoso sexual. Por ahí andaban los rumores que se mencionaban cuando fue nombrado Ministro del gobierno de Carlos Alvarado.

Por ello, al ahora Presidente de Costa Rica, se le restringió el acceso al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional, entre otras cosas.

En medio de una campaña esto se volvió un tema recurrente. Rodrigo Chaves se defendió pero ciertamente la defensa más férrea la ejerció Cisneros. Y de este escándalo pues todo parece indicar que salió bien librado.

Pero en ese momento Rodrigo Chaves era uno más de 8 candidatos con posibilidades de ganar las elecciones.

Sin embargo, el 2 de febrero del 2022 El Observador publicó una encuesta de Demoscopia que colocaba a Chaves en el segundo lugar de las preferencias electorales con un 11.8%. Así desbancaba a Lineth Saborío del PUSC quien se había mantenido en ese segundo puesto detrás del liberacionista José María Figueres.

Cuatro días después ese dato se confirmó. Chaves obtuvo el 16,7% de los votos lo que le permitió meterse en la segunda ronda electoral frente a Figueres, el hijo del caudillo.

Rodrigo Chaves junto a la diputada Pilar Cisneros (Foro Archivo/ El Observador)

Muy hábil, Chaves comenzó a llamarse el hijo del chofer de don Pepe, recordando que su papá trabajó para el tres expresidente de la República.

En esa etapa de la campaña de segunda ronda, mientras en el PLN hubo un tiempo casi muerto, Chaves se movió a toda máquina. Visitó el país, comenzó a hablarle a la gente de lo que quería escuchar. Repitió una y mil veces sus promesas.

Fue hábil para librarse de algunos escandalillos y ataques, y fue más hábil todavía aún en los debates.

El tema sobre el financiamiento de la campaña de Chaves fue objeto de dudas y críticas en esta etapa. El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) le llamó la atención a la agrupación por no presentar la lista de compradores de certificados por un monto de ¢638 millones.

Fue una campaña de segunda ronda de golpe entre ambos adversarios, llena de ataques, dimes y diretes. Cargada de información y desinformación mediante el uso de las redes sociales.

Llegó el domingo 3 de abril y Rodrigo Chaves ganó la silla presidencial con un 52,8 de los votos emitidos.

A partir de ese momento, caminando al lado de su inseparable compañera, Pilar Cisneros se dieron a la tarea de armar gabinete. Una tarea para nada sencilla para un presidente nuevo en la política nacional y de un partido en pañales.

Finalmente, el 8 de mayo asumió el nuevo presidente. Rodrigo Chaves, de 60 años de edad (ahora tiene 61), nacido en San José, casado en segundas nupcias y desde el 2015 con Zigne Zeikate, padre de dos hijas.

El presidente Chaves junto a su esposa Signe Zeikate y sus hijas (Foto Archivo/ El Observador)

Claro, que esa campaña le pasa facturas porque está vivo el cuestionamiento a los métodos de financiamiento del Partido Progreso Social y si existió o no una estructura paralela no declaradas al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) Este

Como presidente

¿Que torta se jalaron? le preguntó a sus vicepresidentes el día que tomaron posesión del Gobierno, “bueno, nos jalamos”, bromeó.

Y sí, se jaló alguna torta al hablar de eliminar la vacunación obligatoria como su primera acción como Presidente. Resultaba que eso es una tarea del resorte de la Comisión Nacional de Vacunación.

También eliminó el uso obligatorio de las mascarillas y declaró emergencia por el ataque cibernético del que fue objetivo el Gobierno, como sus primeras acciones como nuevo Gobierno.

Insistió sobre sus promesas de bajar costo de vida y compartir la corrupción.

Y aunque con tropiezos, lo cierto es que dio la impresión de ser el Presidente que hace y de eso este país parecía estar ayuno.

Esa ha sido la tónica durante estos siete meses de la Administración Chaves. Se ha visto a un Presidente ejecutivo y con liderazgo pero también a un hombre muy confrontativo. No le gusta que lo cuestionen y repela con ataques lo que siente que son ataques.

No tiene reparo en regañar a sus ministros en público, no tiene reparo en responder como se le viene en gana a los periodistas.

Ha tenido diferencias con los diputados, por diversos temas. Ha señalado directamente a algunos sectores productivos y/o empresas. También enfiló sus críticas al Poder Judicial.

Es intempestivo. Una mañana llegó de sorpresa al Ministerio Público, sin que lo llamaran, para ponerse a las órdenes del Fiscal y ver qué causas habían en su contra.

Es, sin lugar a dudas un excelente comunicador.  Posiblemente ha hecho menos de todo lo que ha dicho, pero lo sabe contar bien.

Le habla siempre a la señora de Purral, el personaje que él creó. Hasta actúa para anunciar sus visitas a algunas provincias o con motivo de conmemoraciones patrias.

Rodrigo Chaves Joselyn Chacón Casa Presidencial

Foto Arhivo/El Observador

Sube a la tarima a propios y extraños cuando va a hacer anuncios para acuerpar sus decisiones.

Es firme en sus ideas y pensamientos. Dicen que tiene un cuaderno donde anota los temas de su interés y a los que les lleva el pulso.

Da la impresión de que no se siente cómodo cuando disienten de él y casi que se hace lo que él dice. Bueno, un claro ejemplo sería lo que pasó con Álvaro Ramos, el presidente ejecutivo de la CCSS se le salió del sacó y lo despidió. Despidió también a su Ministra de Comunicación.

¿Quiénes le hablan al oído? Su jefe de despacho, Jorge Rodríguez Vives, la diputada Cisneros. Se mencionan también como personas cercanas al empresario Calixto Chaves y el publicista Federico Cruz.

¿Qué viene para el 2023 para el mandatario? No es necesario ser Casandra la pitonisa griega para señalar que tendrá una agenda de temas calientes.

Superado este 2022 asuntos como la revisión técnica y Eurobonos, queda en la agenda del mandatario el desarrollo de propuestas polémicas que ha hecho como la venta del Banco de Costa Rica, la legalización de la marihuana, la incorporación del país a la Alianza del Pacífico y más recientemente al T-MEC.

A eso se suma el alto costo de vida, la inflación, el mal estado de la infraestructura pública y el desempleo que aunque decreció este año sigue siendo de un 11,8% es decir unas 269.000 personas desocupadas.

Y enero podría arrancar con un Congreso enfocado en escarbar historias de ‘troles’ en Gobierno y campaña, y nuevamente financiamiento de partidos políticos.