Tomás Gómez
Carlos Díaz ya es Fiscal general de la República, un cargo que lleva años rodeado de polémica y él asegura que intentará traer un cambio.
Una contundente mayoría de 15 magistrados le dieron su confianza y a los pocos minutos de juramentado, dio una conferencia donde abordó parte de la lista de retos, problemas y pendientes que le esperan en su nueva oficina.
Este es un recorrido por ellos.
1. ¿QUÉ PERSEGUIR?
Una de las principales atribuciones del Fiscal general es definir cuáles delitos atacar más y cómo hacerlo.
Según su visión, debería hacerse un enfoque en las áreas de mayor “dañosidad social”.
“No vamos a descuidar de ninguna manera la criminalidad convencional. Sí vamos a tener, a futuro, que discriminar algunas causas. Porque ya el Ministerio Público está desbordado, no podemos tramitar y aplicar criterios de oportunidad”, explicó.
2. LEY DE CRIMEN ORGANIZADO
La falta de presupuesto para echar a andar la Jurisdicción contra el Crimen Organizado conllevó varias reformas a la ley original.
A nivel jurídico se abrió entonces un debate sobre si algunos de sus artículos se habían eliminado, lo que pondría en jaque múltiples casos.
Díaz alegó que para él se trata de una discusión doctrinaria en la que, desde su óptica, la ley sigue vigente. “Para mi no están derogados”, afirmó al reiterar que tiene la misma línea de Warner Molina, a quien sustituirá en el cargo.
3. LOS RETOS
Cuando se le pregunta al nuevo Fiscal general por los retos, el que más destaca es de los grupos de trabajo.
“El principal reto va a ser conformar equipos de trabajo sólidos”, sostuvo.
“Tenemos que formar nuevos equipos y tratar, de con esos nuevos equipos conformados por las mejores personas atacar esa criminalidad”, señaló también.
Planteó también algunos cambios para que los fiscales regionales reduzcan su exposición ante el crimen organizado y otros peligros.
“Lo mejor que podríamos hacer es acercar personal de las fiscalías especializadas, para que esos fiscales se dediquen a los delitos convencionales”, explicó.
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4. LA REORGANIZACIÓN DE LA FISCALÍA GENERAL
Uno de los puntos donde más cambios espera el nuevo Fiscal General es la organización institucional.
Como primera acción adelantó la recuperación de los Fiscales adjuntos 2, cuatro puestos que formarían su equipo inmediato de trabajo y que servirán de “pilares” para la gestión.
Desde luego, hizo referencia a los problemas económicos, que deberá enfrentar con creatividad.
“Va a ser difícil que nos den más recursos, lo que yo propongo es distribuir”, puntalizó.
5. UNA IMAGEN DAÑADA
Los últimos años no han sido positivos para la imagen del Poder Judicial y la Fiscalía no ha salido invicta.
Jorge Chavarría y Emilia Navas se fueron del cargo en medio de polémicas y Díaz hereda esos problemas. Ante ello, habla primero de una transformación interna que permita motivar al personal.
Promete, de paso, informar de los avances de los casos “con toda transparencia”, aunque sea difícil “sacar” los casos en 6 meses.
De paso prometió apertura con la prensa y entrega de la información hasta donde los límites de la ley lo permitan.
6. ¿PRONTA Y CUMPLIDA?
El nuevo Fiscal General esbozó un esquema nuevo de trabajo para dar seguimiento al trabajo del personal.
“Vamos a trabajar muy duro, vamos a medir rendimientos”, aseguró.
El plan pasa por aprovechar herramientas tecnológicas para redirigir esfuerzos,
“Hay fiscalías atascadas, otras que no tienen tanto trabajo entonces vamos a distribuir cargas de trabajo”, adelantó.
7. LOS MEGACASOS Y EL PODER
En los últimos años hubo operaciones de grandes despliegues como Diamante, Cochinilla o Azteca.
Al respecto el nuevo jerarca dijo que primero tendrá que actualizarse. Diamante, de hecho, está próximo a cumplir un año y según él aún debe analizarlo.
“En ese y en otros casos llamemoslo de dañosidad social obviamente ocupo tiempo para trabajarlos”, adelantó.
De paso, dijo no tener vínculos con ningún miembro de los Supremos Poderes, lo que permitiría su participación directa en las investigaciones sin tener que inhibirse.
