Tomás Gómez
Este viernes acabó el tercer y penúltimo año de la Asamblea Legislativa actual, que deja como herencia 136 leyes nuevas para el país.
Marcada por el paso de la pandemia, el año incluyó varios recesos por casos de covid-19 en los despachos de los diputados y hasta por la constante mudanza.
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El 1° de mayo del 2020 la sesión fue en el Museo del Niño y semanas después se retornó a Cuesta de Moras. Para octubre, por su parte, los diputados lograron por fin estrenar el eficio actual.
Con la producción de este año, la legislatura se convierte en la segunda más productiva de las que llevan los diputados actuales:
Tras 12 proyectos fallidos, los diputados lograron este año legislativo por fin estrenar un nuevo edificio (Alonso Solano/El Observador)
El covid-19 se pasea entre las leyes (y deja pendientes)
La llegada de la pandemia demandó algunos ajustes legales para tratar de reducir el golpe económico.
Por un lado se aprobó la reducción de jornadas laborales, una importante demanda del sector productivo. A esta medida se le hizo una prórroga y aún se debate un ajuste para su aplicación en el sector turístico.
Además para el sector turístico se amplió la prórroga del Impuesto al Valor Agregado para sus actividades.
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También se realizaron ajustes presupuestarios para financiar el Bono Proteger, que luego termino siendo investigado por la Comisión de Gasto Público ante las denuncias contra el Gobierno.
Finalmente apareció una rebaja al marchamo, para lo cual llegaron a haber hasta 3 proyectos.
Entre los pendientes quedaron dos proyectos que tanto el Gobierno como varios partidos de oposición y los sectores productivos: la agenda del Fondo Monetario Internacional (FMI), Empleo Público y la adhesión la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Tras largas sesiones y cientos de mociones, la Comisión de Gobierno y Administración concluyó el dictamen de la Ley de Empleo Público, que ahora está culminando su fase de ajustes en el Plenario para ir a los debates definitivos (Cortesía Asamblea Legislativa)
¿Qué dijeron los diputados?
Las diversas fracciones coincideron en la huella que dejó el covid-19 en la agenda legislativa y reclamaron las deudas que quedan en cuánto a reactivación económica.
El jefe de fracción de Liberación Nacional, Luis Fernando Chacón, celebró 51 de las nuevas leyes son de autoría verdiblanca.
“Hemos enfrentado los temas estructurales país de frente, con valentía y transparencia. Proyectos que debieron haber sido retomados tiempo atrás y posiblemente le hubiéramos evitado al país llegar a puntos extremos”, planteó.
Desde el PUSC, el jefe saliente Rodolfo Peña destacó entre las principales herencias el sistema de recortes al presupuesto nacional por casi ¢54.000 millones mediante una megamoción apoyada por la mayoría de diputados.
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Peña reclamó además que el esfuerzo por alimentar el Bono Proteger no alcanzó a toda su población meta de manera clara. “Quedamos claros que no llegó a la gente que más necesitaba una gran parte de estos recursos”, señaló.
El frenteamplista José María Villata, por su parte, cerró con señalamientos al Gobierno. A su criterio, su enfoque dejó empeorar los indicares sociales del país.
“Lo que hemos visto es que el Gobierno ha dejado un oportunidad perdida”, concluyó.
Tras el aval de la Sala Constitucional, la entrada definitiva a la OCDE depende de una segunda votación de los diputados (Archivo/El Observador)
