Paula Ruiz
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) requiere ¢757.000 millones para no afectar el portafolio de inversiones establecido para los años 2020 y 2021, según reconoció Román Macaya, jerarca de la entidad ante los diputados.
El presidente ejecutivo de la Caja explicó que la cifra concuerda con la proyección de aquí a diciembre sobre lo que dejará de percibir la entidad, por aspectos como reducción de la Base Mínima Contributiva, mayor gasto e inversión y menores ingresos por el desempleo, todo, alrededor de la pandemia.
Macaya explicó ante la Comisión de Asuntos Hacendarios que la Caja cuenta con dos fondos de reserva:
- Uno del Seguro de Enfermedad y Maternidad (SEM) por ¢1,3 billones
- Otro sobre Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de ¢2,4 billones
“Tomar los fondos de la reserva del SEM no es gratuito, no es que están parqueados en títulos, ya sea de Hacienda o bancos públicos a la espera de ver que hacemos, esos fondos tienen nombre y apellido son para infraestructura y equipamiento”, explicó.
Román Macaya, presidente de la CCSS. Foto: Asamblea Legislativa
Actualmente, el portafolio de la institución contempla 10 grandes proyectos hospitalarios, dentro de los cuales se encuentran cuatro ya encaminados:
- El Hospital de Puntarenas
- Hospital de Turrialba
- Torre Médica del Hospital México
- Torre Médica del Hospital Calderón Guardia
Además, hay otros seis que están contemplados, pero sin que aún hayan iniciado. En este grupo se encuentran los centros médicos de Cartago, Limón, Golfito, la Torre nueva del San Juan de Dios, Torre Nueva del Hospital Blanco Cervantes y la del Hospital de Niños, solo esta última con financiamiento propio.
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“¿Cuál sería el monto mínimo que la Caja debería recibir ya sea como aporte adicional para compensar base mínima contributiva o como abono del Estado(…) para no tener que ver afectado ese portafolio de inversiones en 2020 y 2021?”, cuestionó José María Villalta, diputado del Frente Amplio.
“Si tuviera lista del niño sería ¢757.000 millones para decir que todos los títulos en la reserva no los vamos a tocar”, respondió Macaya.
Así las cosas, sin esos ingresos, aseguró que tendrían que recurrir a utilizar esos títulos, incluso, hay algunos que no han sido renovados.
“De aquí a diciembre tendremos que ser conservadores para tener la liquidez”, amplió el presidente ejecutivo.
La deuda del Estado con la entidad asciende a ¢1,9 billones, según detalló Macaya.
Los números de la CCSS
Otros números revelados por Macaya durante la audiencia, tienen que ver con que se han utilizado ¢36.042 millones del fondo de emergencia, cuya totalidad estaba fijada en ¢65.000 millones.
Dentro de los dineros utilizados se encuentra la inversión en el Centro Especializado de Atención de Pacientes con COVID-19 (Ceaco), así como otras compras extraordinarias relacionadas con la pandemia.
La Caja estimó que solo por concepto de Base Mínima Contributiva, dejarán de percibir ¢49.110 millones, producto de la emergencia nacional.
Para lo anterior, los diputados establecieron una cláusula dentro del reciente empréstito aprobado con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Alianza Francesa de Desarrollo, para trasladarle $60 millones con tal de compensarle a la Caja.
Sin embargo, solo para este rubro, Macaya estima que faltarían aún ¢14.349 millones para completar dicho desbalance.
Por otra parte, la institución estima que hay pérdidas por ¢32.000 millones por los servicios que no ha podido ofrecer durante la pandemia, como consulta externa y cirugías.
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