Tomás Gómez
Las obras de ampliación en la carretera a Limón no salieron bien paradas de la revisión hecha por la Contraloría General de la República (CGR), que incluso pidió la intervención del Gobierno al considerar que este proyecto tiene tiene “serias deficiencias”.
El ente contralor detectó problemas de diseños, financiamiento y planificación que lo llevaron a advertir al presidente Rodrigo Chaves sobre la gravedad de la situación y la necesidad de tomar acciones drásticas.
“Si no se toman medidas prontas y adecuadas las condiciones persistirán y el proyecto va a continuar con una limitada capacidad de respuesta, poniéndose en riesgo su conclusión”, dice el oficio firmado por la propia contralora, Marta Acosta.
“De ahí la necesidad de informar a su Despacho lo que acontece con el propósito de que las medidas y necesaria articulación provengan del más alto nivel”, agrega.
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La Contraloría enfatiza en que las obras, cuya culminación se había prometido para el Gobierno y aún se siguen postergando, tienen problemas desde su concepción, lo cual repercute en los trabajos adicionales que han surgido.
“El Proyecto RN 32 no cumplió con la fase de preinversión; por lo que el alcance de las obras establecidas en el contrato no contó con el sustento técnico suficiente para garantizar la seguridad vial para todos los usuarios y el adecuado funcionamiento de la vía”, alertó.
4 puntos críticos
El trabajo de la CGR está contenido en el informe DFOE CIU IF-00005-2022. Este vio temas de normativa técnica, legal y buenas prácticas, destacando el rol clave de la vía para el país.
Marcela Aragón, gerente de Fiscalización para el Desarrollo de las Ciudades sintetizó en 4 puntos los problemas hallados:
- La determinación de las obras no ha seguido un proceso o secuencia lógica de acuerdo con la normativa de Mideplan.
- Se han elaborado diseños sin contarse con la fase de preinversión y sin contar con su viabilidad
- No se cuenta con un estudio integral ni de seguridad vial que sirva de sustento para las definición de las obras adicionales y también se han iniciado gestiones relacionadas con el financiamiento sin que se cuente con la fase de preinversión ni se tenga definido el plazo, alcance y el presupuesto requerido
100 kilómetros eternos
Las obras en cuestión abarcan la ampliación, a cuatro carriles, de 107 kilómetros de la ruta 32, desde el cruce de Río Frío hasta el cantón central de Limón.
Su costo total es de $465,6 millones, de los cuales, el 85% corresponde a un préstamo con el Exim Bank of China y el restante, 15% se financia con una contrapartida nacional.
Su desarrollo está asignado a la firma China Harbour Engineering Company de Costa Rica S.A (CHEC).
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Las obras arrancaron el 20 de noviembre del 2017 teniendo como plazo 3 años. La ruta no se completó en noviembre del 202o y diversas prórrogas han pasado esa fecha, sin que llegaran luces de la promesa.
Un informe dado a conocer por El Observador en febrero anterior destacaba un rezago del 42% respecto al cronograma. Las falencias abarcaban trabas con puentes vehiculares y peatonales así como decenas de expropiaciones.
Las últimas promesas hechas por el expresidente Carlos Alvarado contemplaban terminar las obras en 2024 pero evaluaciones expertas preveen que al ritmo actual, las obras en la Ruta 32 podrían tardarse hasta el 2029 (Archivo)
