Confidencial, Nicaragua
Confidencial (Nicaragua) para El Observador
Un hombre de Estelí, de 70 años, se convirtió en el tercer muerto por COVID-19 en menos de 24 horas, en Nicaragua, que ya sumaría un total de seis muertos por la pandemia del coronavirus.
El hombre fue el tercer caso positivo confirmado por el Gobierno el pasado 27 de marzo y falleció la noche de este miércoles 29 abril en su vivienda de Estelí, después de varios días de ser dado de alta en el hospital San Juan de Dios de esa ciudad del norte de Nicaragua, según confirmaron a CONFIDENCIAL familiares y fuentes médicas.
“En las pruebas ya daba negativo de covid-19. Por los daños irreversibles de fibrosis pulmonar, le dan de alta, para que vaya a morir a su casa. Siempre es producto de una muerte por COVID-19, aunque el Gobierno lo va a reportar como otra cosa”, advirtió un médico de la ciudad.
Familiares del paciente informaron a CONFIDENCIAL que el Ministerio de Salud (Minsa) designó a dos médicos para atenderlo en su casa de habitación, pero que el martes pasado les dijeron que no había nada que hacer, “que nos resignáramos”.
Comentaron que las autoridades les “han prohibido hablar”, y que el Minsa y la Policía establecieron un control en contra de la esposa del paciente, ahora fallecido, para que no se “acerque a ningún vecino”, autorizándole que únicamente se comunique con su familia.
“La Alcaldía (de Estelí), ha enviado personas a vigilar de cerca la casa, por si llegan medios de comunicación”, dijo el familiar.
Minsa lo sacó de la lista de positivos
El pasado 27 de marzo, el Gobierno reportó el caso del señor de 70 años junto al de una paciente de 52 años, que presuntamente sería su esposa. Ambos fueron catalogados como “casos importados”, ya que llegaron al país procedentes de Estados Unidos. La mujer fue dada de alta en los días siguientes, y el hombre días más tarde.
La vicepresidenta y primera dama, Rosario Murillo, subrayó ese día que el paciente era de “de alto riesgo por su edad y otros padecimientos”, pero esa fue la última vez que el Gobierno mencionó el caso del señor, ya que luego lo sacó de sus reportes diarios sobre la covid-19, sin indicar si se había recuperado o seguía en vigilancia.
“Él (paciente) estuvo siempre en Estelí, pero lo tenían en un área tapada con plástico negro, que es la unidad especial del covid-19”, dijo la fuente médica.
El cuarto muerto por COVID-19
El secretario del Minsa, Carlos Sáenz, reportó este miércoles la cuarta muerte por covid-19 en Nicaragua: un hombre de 66 años de edad, residente en un asilo de ancianos en Managua, a quien no se le daba seguimiento oficial, porque su caso no figura en la lista de positivos confirmados por el Gobierno. Sin embargo, las autoridades insisten en negar casos de “transmisión local comunitaria”.
Según la información del Minsa, el paciente falleció el miércoles, cuando “fue llevado por sus familiares en estado delicado, desde un centro privado para adultos mayores a una unidad hospitalaria”.
El hombre no estaba incluido (ni tampoco fue sumado) en el reporte oficial de casos positivos de coronavirus del Minsa, que además no informó cómo la persona adquirió el coronavirus ni porqué esperó un día para reportar su muerte o con quiénes estuvo en contacto.
En otro reporte confuso y escueto sobre la pandemia, el Minsa no específico si el hombre falleció por el nuevo coronavirus, optando por hacer énfasis en que “llegó con un historial de múltiples padecimientos crónicos, entre ellos alzheimer, diabetes e hipertensión”.
Otro fallecido que el Minsa oculta
En la madrugada de este miércoles 29 de abril, un despachador de vuelos del Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, de Managua, sospechoso de coronavirus, falleció en el Hospital Monte España, de la capital. Este paciente sería en realidad el cuarto fallecido por la pandemia en Nicaragua y el segundo trabajador de la terminal aérea en menos de una semana, aunque el caso no ha sido confirmado por el Minsa.
El nicaragüense, de 57 años de edad, permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital desde el domingo 26 de abril, a causa de una “neumonía atípica”. Sin embargo, médicos de ese centro asistencial afirman que se trataría de un caso de covid-19, debido a que presentaba todos los síntomas de la enfermedad y habría tenido contacto con el primer fallecido del Aeropuerto: otro despachador de vuelos, de 58 años, que agonizó en el Hospital Amistad Japón – Nicaragua, de la ciudad de Granada, el pasado 23 de abril.
Confidencial, Nicaragua
