(Washington D.C.). Si de todos modos la capital de Estados Unidos es uno de los lugares con más seguridad en el mundo, la llegada de una decena de presidentes y sus comitivas provocó el aumento de los operativos y efectivos en sus calles.
La Cumbre de la Alianza para la Prosperidad Económica de las Américas (APEP) convocó a 12 países de la región entre el jueves y viernes pasado.
Algunos de los mandatarios estuvieron durante varios días en Washington y todos tardaron casi 5 horas reunidos. Todo quedó ilustrado en un acto de apenas un minuto.
Destacó la presencia Justin Trudeau, Primer Ministro de Canadá, quien hasta horas antes no estaba segura su llegada, sin embargo arribó y fue protagonista de la foto oficial.
Las filas de camionetas
Una patrulla, seguida de dos camionetas negras y una buseta, indicaba que por las calles de la capital venía algunas de las presidencias que asistieron a la cumbre convocada por Joe Biden.
Todos los carros principales tenían una bandera de Estados Unidos y otra más para identificar de qué delegación se trataba.
Así era el recorrido del grupo de Costa Rica, con la asistencia del mandatario Rodrigo Chaves:
Epicentro en la Casa Blanca
El escenario más simbólico de la cumbre fue la Casa Blanca, donde los asistentes salieron a tomarse la foto grupal.
Llegar a ese momento, sin embargo, estuvo acompañado de un largo protocolo.
Un primer requisito para ingresar a la sede del Gobierno de Estados Unidos era la acreditación formal con varios detalles.
De previo existe una lista de asistentes que al llegar es contrastada con los pasaportes, lo que no garantiza el ingreso. Por ejemplo, el registro de una reportera tenía un error en un número de la fecha de nacimiento y ello implicó una nueva verificación que retrasó por completo la revisión.
Luego está también la revisión de todos los equipos electrónicos. Los periodistas y personal técnico son separados de los artefactos tecnológicos mientras perros y policías hacen la revisión uno por uno de los elementos. Aquí se incluyen computadoras, cámaras y otros dispositivos.
De ahí se pasa a un arco detector de metales y una segunda verificación de escaneo en el perímetro de la Casa Blanca.
Cruzado el portón la movilidad tampoco es a la libre.
Los asistentes tienen delimitada su área de estancia según la misión al entrar. La prensa, por ejemplo, tiene una oficina específica donde debe permanecer y esperar a que sea su momento de salir.
En ella hay una especie de auditorio donde comúnmente se realizan las conferencias televisadas.
Detrás de ese espacio para los medios y frente a ese escenario que se observa en las cadenas norteamericana de noticias, hay varias filas de silla y están todos los equipos para poder salir al aire.
En los jardines de la famosa residencia del gobierno estadounidense están las “tiendas de campaña” desde donde algunas cadenas de televisión transmiten las noticias todo el año, sin importar si el clima está húmedo como es tradicional de Washington, la nieve o los 0° grados ventosos que acompañaron estos días.
Esa es otra parte que no siempre se ve de las transmisiones de cadenas como NBC, CNN, Fox News y otras.
Un minuto para enmarcar la cita
Luego de moverse por las calles de Washington y lograr estar dentro de la Casa Blanca, llegó el momento más público de la cita: la foto del recuerdo.
En uno de los jardines de la Casa Blanca se instaló una pequeña tarima donde sería el posado oficial.
Un sonido indicó que ya saldrían y fueron apareciendo uno a uno todos los mandatarios, encabezados por Biden.
Una vez que que cada uno se ubicó en el punto señalado, comenzó la lluvia de flashes y videos para registrar las imágenes de todos los participantes.
Todo ello se concentró en apenas un minuto. Ese fue el corto y escaso tiempo permitido para que la prensa pudiera estar en el jardín de la Casa Blanca con los presidentes.