Sergio Arce
Hace cinco años nació en Guanacaste una alianza conformada por tres empresas y una fundación que creyeron en las bondades ambientales, económicas y sociales de la producción y uso del hidrógeno verde.
Ad Astra Rocket, Grupo Purdy, Relaxury y Crusa como moderador vieron al hidrógeno verde en aquel entonces -y hoy con mayor convicción- como una alternativa de energía sostenible para el país.
Dos años después, en el 2019, Costa Rica lanzó su Plan Nacional de Descarbonización con el compromiso de convertirse “en una economía moderna, verde y libre de emisiones” para el 2050.
En este contexto, las firmas apuntalaron sus esfuerzos y voluntades con la Alianza por el Hidrógeno, que hoy ve sus réditos únicos en Latinoamérica.
¿Cómo funciona esta exitosa alianza? Jose Daniel Peña, CEO & Socio Director en Relaxury, explicó a El Observador parte de las acciones emprendidas por los diferentes miembros.
Ad Astra Rocket -del científico nacional Franklin Chang Díaz- es la responsable de producir el hidrógeno desde su operación en Liberia.
Por su parte, Grupo Purdy logró con la casa matriz de Toyota en Japón que hiciera un inusual envío de tres carros Toyota Mirai a Costa Rica.
Inusual porque nuestro país se convirtió en el primero de Latinoamérica en contar con el primer vehículo de hidrógeno verde en el mundo de esta marca.
Uno de estos carros está en Ad Astra y los otros dos están en poder de Relaxury. Esta empresa ofrece experiencias y soluciones de movilidad de lujo para hoteles, complejos y desarrollos en Guanacaste y Costa Rica en general.
Y todo apunta a que pronto habrá otra unidad de Toyota Mirai en curso. Solo se está a la espera de que Ad Astra aumente su capacidad de producción de hidrógeno verde, comentó Peña.
Finalmente el aporte de Crusa ha sido especial, ya que es actualmente un garante o administrador de un fondo especial.
Un entorno difícil
Llegar hasta este punto ha significado mucha resiliencia y convicción por parte de los involucrados en la Alianza por el Hidrógeno.
No solo porque ha implicado una enorme inversión de recursos, pero también hay que tomar en cuenta el impacto de la pandemia.
Pero, ante todo, Peña comentó sobre la “incertidumbre jurídica por la falta de claridad en cuanto a lo que se espera sobre el impulso con estas energías renovables”.
“Hay que saber además cuáles serán los papeles del ICE o Recope en este tipo de energías y cuánto dejarán a la empresa privada participar de manera abierta y regulada”, expresó el empresario.
El 22 de mayo trascendió que el Gobierno anunció que no convocaría el proyecto de ley sobre hidrógeno verde mientras tenga el control de la agenda legislativa en sesiones extraordinarias.
Así lo confirmó la ministra de la Presidencia, Natalia Díaz, a quien se le consultó sobre esta iniciativa que fue aprobada en primer debate durante la legislatura anterior.
Díaz justificó la decisión de Casa Presidencial porque “no (se debe) considerar oportuno basar la economía del país en una única tecnología”.
Logros en un lustro
Silvio Heimann, CEO de Grupo Purdy, calificó de “gigante” lo que se ha logrado con Alianza por el Hidrógeno por el liderazgo de Costa Rica.
Mencionó, por ejemplo, el hecho de que el país cuenta con autos Mirai que no están disponibles en otras regiones. Pero también en que ya se utiliza aquí el hidrógeno verde en carga pesada.
Tanto los camiones como los automóviles que utilizan esta tecnología cuentan con un equipo que convierte el hidrógeno en electricidad y esto mueve el motor. Básicamente, lo único que liberan es agua, por lo que son libres de emisiones.
Originalmente la planta -que se encuentra en lo que se denomina como una ecosistema de hidrógeno verde-, se diseñó para abastecer de energía al autobús “N’yu’ti” (estrella, en el lenguaje chorotega), el primero de este tipo en Centroamérica. Ahora su capacidad se extendió a transporte pesado y liviano.
Esto le permitió a Relaxury contar con un certificado de carbono neutral, gracias al uso de hidrógeno verde en los dos carros Mirai. Pero Peña señaló que en realidad la operación es “positiva”, porque los vehículos liberan vapor de agua.
Otro logro es que hay más empresas que se unieron a esta iniciativa, como lo son los complejos hoteleros Four Season y Andaz Papagayo.
Los huéspedes de estos hoteles pueden viajar en alguno de los Toyota Mirai, como ya lo hacen los del complejo Las Catalinas.
Heimann confía en que más empresas del sector automotriz se unan a este proyecto, que tiene las puertas abiertas a más actores.
“La Alianza no es una iniciativa de Purdy. La Alianza como tal está abierta a todos los jugadores, a todas las empresas que quieran desarrollar el ecosistema del hidrógeno verde. Y cuando digo todas, me refiero a todas.
“Pero es cierto que Purdy por su filosofía, por su estilo de decisión ejerce un liderazgo claro y habrá otras empresas que están en modo de esperar y ver qué pasa.
“Pero desde la Alianza todas fueron invitadas a participar, todas siguen invitadas a participar en este fascinante desafío que es desarrollar una movilidad que sea confiable y sostenible”, expresó el alto ejecutivo.
España se sube a esta tecnología
Hasta ahora son pocas las naciones que presentan logros similares a los de Costa Rica, a pesar de que los esfuerzos son esencialmente de la empresa privada.
Esta semana trascendió en España la presentación a la prensa de los primeros vehículos de transporte con conductor que emplean hidrógeno verde.
Esto luego de una alianza entre Cabify, Toyota y Enagás, cuya primera parte entrará en vigencia en Madrid.
Este acuerdo permitirá que la empresa automotriz entregará las primeras dos unidades del Toyota Mirai de nueva generación, que serán incluidas en de la flota de Cabify Eco. Enagás será la responsable de facilitar el suministro de hidrógeno verde.
