Rodrigo Díaz
Los atletas de Olimpiadas Especiales, un programa que ha dado grandes satisfacciones al deporte de nuestro país y a los familiares de estos deportistas, por fin tendrán un espacio propio para sus entrenamientos y competencias.
Se trata del Gimnasio Nacional Deportivo y Recreativo de Olimpiadas Especiales Costa Rica del Bicentenario, el cual se construirá en el Parque de la Paz, en la capital.
Su inversión será de ₡1.400 millones y tendrá todas las condiciones seguras apropiadas y exclusivas para la ejecución de los programas deportivos, recreativos y competitivos que desarrolla esta asociación.
La obra contará con una cancha multiuso de 800 metros cuadrados, además de condiciones para la práctica de disciplinas como balonmano, futsal, baloncesto, voleibol y otros deportes colectivos, según las normas para este tipo de atletas. Todas las instalaciones estarán adaptadas a la ley 7.600, Ley de Igualdad de Oportunidades para las Personas con Discapacidad.
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El complejo deportivo tendrá, además, un área de seguridad a cada lado, graderías en uno de los sectores y recinto para ubicación de jugadores, vestidores para dos equipos y para árbitros. Contará también con servicios sanitarios para público, enfermería, bodega general, aulas de capacitación, oficina administrativa y comedor.
La licitación para la construcción de la obra fue publicada en el pasado mes de diciembre en el Sistema Integrado de Compras Públicas (SICOP).
Beneficio para personas con discapacidad
“Miles de niños, jóvenes y adultos con discapacidad tendrán por fin un lugar adecuado para la práctica del deporte que ayude a su incorporación plena en la sociedad costarricense. Esta buena noticia para Costa Rica llega justamente en una época en que vivimos un momento muy difícil de nuestra historia, pero como decía un pensador: ‘No hay nada más fuerte que una idea a la que le llegó su hora’, dijo Carlos Valverde, presidente de la Asociación Olimpiadas Especiales.
Junto con la construcción del gimnasio, se anunció la articulación de una red colaborativa entre el Instituto Costarricense del Deporte (ICODER) y la Asociación Olimpiadas Especiales, Costa Rica. Con ello se busca garantizar el acceso a las personas con discapacidad a los programas, proyectos y actividades deportivas y recreativas, mediante la dotación de una instalación segura y exclusiva para cumplir dicho fin.
Además, la obra buscará apoyar los programas de educación física de los centros educativos de primaria y secundaria para el desarrollo de aptitudes básicas en el deporte y de los valores inherentes a la competencia de las personas con discapacidad.
Rodrigo Díaz
