Josué Alvarado
El Producto Interno Bruto (PIB) de Costa Rica crecerá un 2,9% durante el año 2023, según el pronóstico más reciente del Banco Mundial.
En un informe de junio del 2022 anterior el mismo banco había previsto un crecimiento de 3,4% para el próximo año, lo que significa que el nuevo pronóstico es más conservador.
A pesar de esto, la cifra de 2,9% es superior al promedio de crecimiento de la economía de América Latina y el Caribe, que se espera alrededor del 1,3%.
También es levemente mayor al pronóstico que hizo el Banco Central de Costa Rica (BBCR) y que dio a conocer en octubre del 2022, cuando señaló que el año en curso el crecimiento sería de 2,7%.
Para el 2024 el Banco Mundial prevé que la economía de la región crezca un 2,4%, mientras que la de Costa Rica un 3,1%.
OBSERVE MÁS: Reducción en tasas de interés debería ocurrir lo antes posible, opina expresidente del Banco Central
¿Por qué esta desaceleración?
La economía crecerá un ritmo menor por varias razones, según el mismo informe del Banco Mundial:
- Elevada inflación
- Aumento de las tasas de interés
- Reducción de las inversiones
- Perturbaciones causadas por la invasión de Rusia a Ucrania.
“Dada la frágil situación económica, cualquier nuevo acontecimiento adverso -como una inflación más alta que la prevista, aumentos abruptos de las tasas de interés para contenerla, el resurgimiento de la pandemia de Covid-19 o la intensificación de las tenciones geopolíticas- podría empujar a la economía mundial a la recesión”, señala el Banco Mundial.
El mismo documento explica que la “fuerte desaceleración del crecimiento es generalizada”. Para este nuevo informe se actualizaron a la baja los pronósticos del 95% de las economías avanzadas.
También los del 70% de los mercados emergentes y las economías en desarrollo (MEED).
“Los países emergentes y en desarrollo se enfrentan a un periodo de varios años de crecimiento lento impulsado por una pesada cargada de la deuda y escasas inversiones; al mismo tiempo, el capital mundial es absorbido por las economías avanzadas que enfrentan niveles de deuda pública extremadamente altos y tasas de interés crecientes”, declaró el presidente del Grupo Banco Mundial, David Malpass.
El director del Grupo de Perspectivas del Banco Mundial, Ayhan Kose, le apuesta a las políticas dirigidas a impulsar el crecimiento de la inversión.
Recomienda la creación de marcos de política fiscal y monetaria sólidos y la introducción de reformas integrales destinadas a mejorar el clima para la inversión.
Sin recesión en Costa Rica
Dos economistas consultados por El Observador descartan que estas condiciones vayan a derivar en una recesión, al menos en Costa Rica.
Para otras latitudes, el Banco Mundial pronostica la posibilidad de una recesión económica, lo que es igual a un decrecimiento del PIB durante dos trimestres consecutivos, aunque también podrían intervenir otras variables relacionadas a la actividad económica como un todo: ingreso de los hogares, empleo, ventas, etcétera.
“No creo (caer en una recesión). El dinamismo de nuestra economía lo están haciendo las zonas francas. Si no tuviéramos las zonas francas sí, claro, porque ya estaríamos cerca en el régimen definitivo de un crecimiento negativo”, comentó el economista Gerardo Corrales.
Coincide el también economista José Luis Arce.
Señala que lo que registrará Costa Rica es una desaceleración en el crecimiento, pero posiblemente no reporte números negativos, como sí ocurrió durante la pandemia.
“Eso lo que va a significar es que el desempleo va a dejar de caer, un aumento tal vez no sustancial.
“Por lo menos sería un resultado favorable, que el desempleo se mantuviera, pero lo más probable es que aumente un poco”, añadió Arce.
