Mariana Mena
Daño hepático, problemas renales, anemia y diarreas. Estos son solo algunos de los efectos negativos que puede provocar el consumo de Profilaxis Pre-exposición (PrEP) sin la debida supervisión médica.
Así lo advirtió Gloria Terwes, coordinadora del programa de VIH de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en entrevista con El Observador.
“Hemos detectado casos (de personas) que comparten las pastillas, pero ellas las consumen sin estudios previos. Estas personas pueden tener graves consecuencias”, señaló la experta.
El PrEP es un medicamento que previene la transmisión del VIH en personas con mayor probabilidad de adquirir el virus antes de exponerse.
“Una persona que solicita el PrEP debemos tener cuidado, porque no es solo una pastilla para prevenir la infección. Esto requiere un cambio de conductas riesgosas”, indicó Terwes.
La presentación de este medicamento es un frasco con 30 pastillas y se establece la dosis del tratamiento según la actividad sexual de la persona.
Por ejemplo, si tiene relaciones sexuales “sin planificar con quién”, la recomendación es una todos los días. En otros casos se recomienda el consumo antes y después de la relación sexual.
Exámenes y más exámenes
“Nosotros llevamos un control de los pacientes. Antes de darle el medicamento PrEP se hacen análisis para garantizar que la persona se encuentre bien de salud.
“No es hasta que se tiene el resultado negativo por VIH y otras enfermedades de transmisión sexual que se entrega al paciente la receta”, enfatizó la doctora.
Se estima que en Costa Rica un 85% de las personas VIH positivo son hombres; las mujeres representan el otro 15%.
El programa de la CCSS incluye hombres que tienen sexo con hombres, mujeres trans y parejas de personas positivas.
Enfermedades de transmisión sexual
Asimismo, en los controles de las áreas de salud se detectó que las personas solicitan el medicamento, pero no les interesa realizarse exámenes para determinar si tienen alguna enfermedad de transmisión sexual.
“Nada hacemos si creen que con una pastilla se previene el VIH. Hay otras enfermedades sexuales que además son silenciosas”, expresó Terwes.
Sobre esto la doctora insistió en que es importante el uso de condón y el cambio de conductas de riesgo para prevenir enfermedades como sífilis y gonorrea.
La Caja debe garantizar el control de estas infecciones, no solo el VIH. Por eso la idea es trabajar coordinadamente porque el PrEP forma parte de un “paquete” de intervención”.
“Desde la institución vamos a continuar con estos programas, ya se dejó el plan piloto y estamos por prescribir el medicamento”, explicó Terwes.
La institución cuenta con el medicamento, por medio de donación del Fondo Mundial hasta agosto del 2024.
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Desabastecimientos
A inicios del mes de julio la fundación POSITVX denunció un desabastecimiento del medicamento Triasociado, que contiene tres principios activos para tratar la infección del VIH positivo.
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El año pasado también se presentaron problemas con el despacho del medicamento Atripla.
La institución restableció la entrega; sin embargo, Marcel Zúñiga -de la fundación- denunció que estas situaciones no son nuevas.
“Cuando una persona portadora toma estos medicamentos, dentro de un tratamiento se vuelven ‘indectables’, lo que significa que la carga viral es tan baja que no es detectable y por tanto no es posible transmitirla.
“Para lograr que una persona sea indetectable, se requiere que el tratamiento médico sea constante e ininterrumpido. De lo contrario, el virus del VIH+ puede mutar y volverse resistente a los medicamentos”, señaló Zúñiga.
Para la coordinadora del programa de la CCSS, se espera que estas situaciones no vuelvan a ocurrir. Por el contrario, confía en que se fortalecerá el programa para el control de estas enfermedades.
