Mariana Mena
La Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) reporta con corte a octubre, la atención de 73 menores de edad heridos por arma de fuego.
De acuerdo con el Área de Estadística en Salud, las atenciones en emergencias de este 2023 ya superan el total de los últimos cuatro años.
Por ejemplo, en comparación con el 2022, a dos meses de finalizar el año, hay 31 casos más. Mientras que el 2020 (en pandemia) se registraron 66 casos, posicionándose como el segundo año con más casos.
“Hay varias razones que pueden estar incidiendo en este aumento, desde que son víctimas colaterales de un ataque, hasta menores que están en bandas y se convierten en objetivos de los sicarios”, destacó el criminólogo, Erick Villalta.
“También vemos muchas víctimas que son “accidentes”, debido a una mala manipulación del arma por parte de otro niño o adolescente, que no tenían la intención de hacerlo pero por imprudencia se da el hecho”, agregó.
De igual forma, si vemos el dato por edad, los menores que han resultado más heridos por armas de fuego tienen entre 15 y 18 años, acumulando 54 de los 73 casos de este año y son principalmente hombres.
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Regiones con más casos
Además, los centros hospitalarios donde más atenciones se han realizado por este tipo de ataque contra menores, son en el Área Metropolitana, destacan: el hospital San Juan de Dios con 14 menores y el hospital Calderón Guardia con 7 pacientes.
Mientras que, en las zonas regionales destaca el hospital Monseñor Sanabria en Puntarenas con 7 atenciones y el Tony Facio de Limón con 8 menores heridos.
“Asimismo hay menores que son familiares de algún líder narcotraficante y que en el momento del ataque estaban con la persona. Hemos visto que a los sicarios no les interesa quién está cerca de un objetivo, de ahí que los menores terminen heridos o incluso muertos”, sumó Villalta.
"Y en los últimos años, tenemos un fenómeno que va en aumento y son jóvenes menores de edad que son parte de la banda criminal, llámese campana, vendedores o incluso sicarios que se convierten en objetivos de otras bandas", resaltó el experto.
Heridas mortales
También se ha reportado la muerte de tres niños por heridas de bala de 13, 8 y 4 años, las lesiones han sido principalmente en la cabeza.
“No hay balas tamaño pediátrico; son diseñadas para matar y cada vez vemos que nos llegan más casos donde utilizan armas de grueso calibre, casi militares, que generan daños mayores en los pequeños”, explicó Marco Vargas, de la Unidad de Trauma del Hospital de Niños.
“Además, cuando un niño está de por medio, la velocidad con la que el menor pierde sangre al punto de morir es entre un 40% y 60% más rápido que un adulto”, enfatizó.
De acuerdo con la Unidad de Trauma, por la distribución de los tamaños, el tronco y la cabeza corresponden a porcentajes mayores en la anatomía de un niño y son los lugares donde hay centros vitales.
“Por eso, no es de extrañar que la mayoría de impactos sean en esas zonas, que ponen a los niños en serios problemas, terminan con lesiones seriamente discapacitantes o de manejo muy complejo”, lamentó el médico.
Los expertos coinciden en que decirle a un niño, no toque eso, ahí no se suba, es alimentar más su curiosidad, entonces tener armas en la casa incluye tener una conducta segura familiar, por ejemplo, no tenerla cargada.
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Homicidios al alza
Justamente entre el viernes y la madrugada de este lunes, al menos 16 personas fallecieron por homicidios, según el reporte emitido por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
De esta forma, el OIJ reporta al 06 de noviembre, 777 homicidios dolosos, mientras que el viernes 3 de este mes registró 761 decesos.
Limón tiene la mayoría de los casos, pues en este territorio han sucedido 192 homicidios. Le siguen la capital con 189. En cuanto a Puntarenas, acumula 123 asesinatos en lo que va del 2023 y Alajuela reporta 87.
Con respecto a Guanacaste, 81 personas han fallecido producto de homicidio, mientras que en Cartago 62. La lista la completa Heredia con 43.
El ajuste de cuentas sigue siendo el principal móvil de los homicidios, seguido de riñas o discusiones. Mientras que del total de fallecidos, 313 tenían entre 18 y 29 años, seguido de 215 con edades entre 30 y 39.
Estas cifras son sin precedentes. La más alta se registró en 2022 con 656 homicidios en todo el año. Se prevé que al 31 de diciembre próximo, haya al menos 900 asesinatos en el dato acumulativo.
