Hermes Solano
El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Rándall Zúñiga, compareció este jueves ante la Comisión de Seguridad y Narcotráfico de la Asamblea Legislativa, de cara a conocer la realidad que vive la institución en medio de la crisis de criminalidad que vive el país.
Zúñiga habló de la cantidad de delitos que se han dado en los últimos años y el crecimiento que se ha tenido en este 2023 y de la gravedad de los hechos, principalmente en cuanto a los homicidios.
Costa Rica suma 704 asesinatos al día de hoy, más de 220 en comparación al mismo período del año pasado.
En medio del crimen, también se da la tortura. El jefe judicial señaló que se han visto muchos casos que antes no se presentaban con frecuencia.
“Estando vivos y antes de que los maten les sacan los ojos, les cortan el pene, la lengua, las orejas… en claro acto de tortura”, indicó Zúñiga a los legisladores.
“Son situaciones que se han visto en otros países y ya se está viendo en Costa Rica”, añadió. Semanas atrás se encontró una cabeza metida en una bolsa en el sector de Puntarenas.
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Proyección
De cara al último trimestre del año, el OIJ proyecta que habría más de 900 homicidios en el 2023, un récord histórico, que alcanzaría una tasa de 17,5 muertes violentas por cada 100.000 habitantes.
Un dato alarmante dado por el jefe judicial es que solo en el cantón central de Limón se han dado ya 74 homicidios. Ese cantón tiene alrededor de 100.000 habitantes, por lo que la tasa es sumamente alta.
Ahí en ese cantón, junto a Guápiles y Batán son los lugares en el Caribe donde más casos se han dado. La provincia suma 171 asesinatos en lo que va del año, superado por muy poco por San José.
La edad promedio de la mayoría de las personas que perdieron la vida de esta manera va desde los 18 y hasta los 29 años.
El director del OIJ habló este jueves de 21 víctimas colaterales; es decir, que murieron en medio de la lluvia de balas o el ataque hacia otra persona.
La semana anterior, el subjefe del OIJ, Michael Soto, dijo que esa cifra de víctimas colaterales estaba en 26 o 27.
El tema de la criminalidad creciente se liga al narcotráfico y a esa lucha de territorios de las bandas.
Zúñiga señaló que los bunkers -que son los lugares donde venden droga- se obtiene de ganancia entre un millón de colones y hasta 15 millones de colones diarios.
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Más marihuana
Otro de los temas que mencionó es que el trasiego de cocaína y marihuana continúa a gran escala y que la posición geográfica de Costa Rica es un aliado de los criminales para transportarla.
Señala que el país es una “bodega” y que ahora, a diferencia de años atrás, se han dado mayor cantidad de decomisos de marihuana que de cocaína.
Zúñiga presentó los datos, que dicen que en 2020, por ejemplo, los decomisos de cocaína eran el 76% del total, mientras que de marihuana del 24%.
En este 2023 se ha realizado un 56% de decomisos de marihuana y el 44% de cocaína.
