Tomás Gómez
El trabajo internacional hecho a favor del ambiente y sobre todo el simbólico Acuerdo de París le valieron a la costarricense Christiana Figueres recibir el galardón al “Gran Negociador”.
Se trata de un reconocimiento dado por la prestigiosa Escuela de Leyes de la Universidad de Harvard. Este celebra los “logros en el campo de la negociación y la resolución de disputas que han tenido un impacto significativo y duradero”.
A Figueres se le reconoció haber logrado recomponer los planes para una nueva política anticontaminación mundial, luego que fracasara un primer plan en 2009.
Ese incidente, ocurrido durante la Cumbre de Copenhague, requirió de un nuevo esquema de pactos que llevó a tener en 2015 el acuerdo en la Cumbre de París.
En su discurso de aceptación, la costarricense recordó la amplia preparación que tuvo que tener la conferencia y como durante meses fueron necesarios viajes y reuniones para cocinar un resultado favorable.
Para llevar ese proceso, habló de las negociaciones con la analogía de un cisne. Esta consiste en cómo nada estas aves, que se mueven con fuerza bajo el agua pero arriba de esta perfilan “total gracia y ecuanimidad”.
“Porque te están observando constantemente, y si el mensaje que estás transmitiendo es de ansiedad y miedo, eso es contagioso”, apuntó.
Por su parte, el presidente de la Universidad de Harvard, Larry Bacow, destacó en su discurso las cualidades que tuvo Figueres para cosechar sus resultados.
“No hay grandes negociadores que no sean buenos oyentes, y ella lo ha hecho magníficamente”, señaló.
El sello internacional de Christiana Figueres
Christiana Figueres nació en San José en 1956 y estudió antropología en la London School of Economics.
Por décadas ha laborado en materia ambiental y de cambio climático a nivel internacional.
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Fue negociadora de la Convención Marco de la ONU sobre Cambio Climático y del Protocolo de Kioto. También fue parte del Mecanismo de Desarrollo Limpio y luego alcanzó la Secretaría Ejecutiva de la Convención.
En ese cargo estuvo del 2010 al 2016, destacando su rol en las negociaciones para alcanzar los logros de París.
