Tomás Gómez
Medios afines al régimen sandinista de Nicaragua comunicaron la muerte del comandante Edén Pastora, ocurrida -según su fuente oficial- este martes a causa de un infarto.
La noticia fue publicada por el periodista oficialista Moisés Absalón Pastora y replicada por TeleSur, cadena vinculada a los gobiernos izquierdistas de América Latina.
Karla Pastora, una de las hijas del dirigente, también confirmó el dato en sus redes sociales.
Dicha información también fue divulgada minutos después por el periódico La Prensa, opositor al gobierno orteguista.
Una muerte confirmada y rechazada
La salud de Pastora está bajo escrutinio desde hace semanas sin que hubiera certeza de su estado real dado el secretismo con que se maneja la información oficial en el país vecino.
El llamado “Comandante Cero” había sido ingresado al Hospital Militar de Managua por problemas respiratorio y luego fue dado de alta, pero tras una recaída tuvo que ser internado nuevamente.
Así permaneció durante la semana anterior hasta que el sábado trascendió la noticia de su muerte, primero confirmada a este medio por uno de sus hijos y posteriormente desmentida.
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Figura histórica
Pastora, nacido en 1936, fue una de las caras más reconocidas de la lucha contra la dictadura de la familia Somoza y luego de la Revolución Sandinista.
Una vez instalado en nuevo gobierno el comandante rompió con sus antiguos compañeros para liderar una contrarrevolución que dirigió en parte desde Costa Rica.
Sus diferencias con dirigentes como Daniel Ortega lo mantuvieron en el exilio por varios años hasta que se dio la reconciliación.
En su nueva etapa como sandinita Pastora fue delegado como encargado de la zona del Río San Juan, cuyo dragado generó una crisis política con el gobierno costarricense que debió ser dirimida por la Corte Internacional de Justicia.
