Sergio Arce
Nigel es la nueva tormenta tropical que avanza por las aguas del Atlántico con vientos sostenidos de 97 km, de acuerdo con el más reciente reporte del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos.
El pronóstico de la CNH es que Nigel no ingrese al Caribe; más bien se espera que se dirija hacia el Atlántico Norte sin afectar poblaciones.
Con respecto a Lee y Margot, el CNH indica que ambos meteoros se degradaron y ahora son ciclones post-tropicales.
Lee está situado justo al norte de la isla del Príncipe Eduardo, en Canadá, y Margot está localizada sobre el Atlántico central subtropical central.
Sin embargo, los especialistas del Centro Nacional de Huracanes tienen en la mira una onda tropical -que se encuentra frente a las costas africanas- y una depresión tropical.
“El desarrollo gradual de la onda será posible y una depresión tropical podría formarse a finales de esta semana o fin de semana mientras el sistema se desplaza hacia el oeste por el Atlántico tropical”, apunta el reporte del CNH.
Por ahora no se reportan daños por el impacto de Lee sobre Canadá.
Menos huracanes en el Caribe
La temporada de huracanes comenzó el pasado 1 de junio y se extenderá hasta el 30 de noviembre.
El pronóstico del Servicio Meteorológico Nacional de México señala para esta temporada en el Atlántico:
- De 7 a 9 serán tormentas tropicales
- De 1 a 3 huracanes de categorías 1 o 2
- De 2 a 4 huracanes de categorías 3, 4 o 5
La expectativa es que esta temporada del 2023 esté un 10% por debajo de los promedios tradicionales en vista del impacto del fenómeno El Niño.
Estos son algunos efectos de El Niño:
- Disminución en la formación de Ciclones Tropicales
- Altas temperaturas
- Déficit de lluvia en el Pacífico y Valle Central
- Exceso de lluvias en la Vertiente del Caribe
Según los registros del IMN, la sequía del 2014-2015 provocada por una fase El Niño se convirtió en la más intensa desde 1930. Generó gran afectación en el sector agrícola y ganadero en la vertiente del Pacífico.
Mientras que en el 2019 el fenómeno provocó una disminución de hasta el 55% de las lluvias en todo el país. Los sectores de Caribe norte y sur presentaron un déficit del 75%.
El Niño es un fenómeno natural de anomalía de la temperatura superficial del océano Pacífico ecuatorial, que tiene consecuencias importantes para el clima alrededor del planeta.
