Tomás Gómez
La polémica volvió otra vez a la fracción oficialista de Progreso Social Democrático (PSD).
Ahora porque dos de sus miembros fueron a una asamblea de Pueblo Soberano, partido que está en proceso de formación y que se define como afín al presidente Rodrigo Chaves.
Se trata del diputado josefino Manuel Morales y la cartaginesa Paola Nájera, quienes bajaron el perfil a su participación en el evento.
Ellos argumentaron que fueron invitados y que se mantienen trabajando con el resto de la fracción del Progreso Social Democrático.
No obstante, la dirigencia del PSD reclama que hay algo más y por tanto analizan los pasos a seguir.
Así lo señaló la también diputada y presidenta del partido, Luz Mary Alpizar.
“Los compañeros han dado declaraciones y han dado sus respuestas, le dejamos a los costarricenses que analicen, sopesen, analicen estas respuestas”, afirmó.
“Son los compañeros diputados los que deben responder qué es lo que nos están diciendo sin palabras”, aseveró.
A ello agregó que a lo interno verán el caso ante varias solicitudes de dirigentes y militantes.
“Miembros de nuestro partido, asambleistas nacionales, que fueron los que votaron por ellos en el marco de la confianza nos están pidiendo y los órganos lo vamos a hacer un análisis de esta situación”, puntualizó.
Las excusas de los diputados
La coexistencia del PSD y Pueblo Soberano ha generado tensiones en los últimos meses dentro del oficialismo.
El fin de semana, por su parte, llegó un punto de giro cuando los diputados fueron a la actividad de la otra agrupación.
Consultados al respecto, Morales dijo que fue a acompañar a su hermana menor, que es militante del nuevo grupo.
Nájera, por su parte, adujo que los dirigentes de Cartago que habían apoyado su candidatura la invitaron.
La jefa de fracción, Pilar Cisneros, fue más reacia a referirse al caso y dijo que les tocaría a los legisladores dar su versión.
“Que vayan a ese partido, a otro partido, cada uno es libre de ir donde quiera. Talvez estaban solo informándose”, comentó.
