Allan Arroyo
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó que entre la tarde del martes y la mañana de hoy miércoles se entregaron a la justicia cinco personas relacionadas con la organización criminal de Alejandro Arias Monge, alias Diablo.
En esta lista de personas que llegaron a la fiscalía está el padre del todavía prófugo más buscado de la policía de Costa Rica.
De esta forma, se cierre el amplio operativo con el cual las autoridades judiciales pretendían desarticular el lunes a toda la estructura de narcotráfico y lavado de dinero que opera en el Caribe pero que se extendió a otras zonas del país.
“El mejor jugador de fútbol del planeta no puede ganar la Copa del Mundo sin su equipo”, dijo el director del OIJ, Randall Zúñiga a inicio de semana, al confirmar que el objetivo era “retirarle toda la estructura criminal.”
En 40 allanamientos, las autoridades lograron la detención de más de 20 personas, incluyendo a la esposa, hermano y el segundo al mando de Arias Monge.
Desde marzo, la policía reporta otras 34 detenciones de este grupo.
Allanamientos del lunes en Limón, San Carlos, San José y Heredia. (Captura de imagen / OIJ)
Solo falta Diablo
La policía judicial calificó la operación como se absoluta relevancia e importancia. Seguridad Pública describió a esta organización criminal como muy peligrosa.
Con la estructura desarticulada (a la espera de que se dicten medidas cautelares por un juez), el objetivo ahora es que la detención de alias Diablo se facilite.
Zúñiga la calificó el lunes como una operación de “gato y ratón”.
“Cuando nosotros vamos por esta persona, que se ubica en lugares muy recónditos, de accesos bastante difíciles, hay que usar navegación, caminar y generalmente, cuando estamos cerca, lo que hace es pasarse a la frontera con Nicaragua”, explicó el jefe policial.
Pese a esto, las autoridades dicen tener una estrategia y recibirán ayuda de un cuerpo policial de Estados Unidos para lograr su captura “lo más pronto posible”. Por ahora no se brindan más detalles.
A este grupo se le vincula con el importante aumento de homicidios de los últimos años en Costa Rica, por la disputa entre bandas narcotraficantes.
El país cierra el 2023 con cifra récord de asesinatos. Hasta este miércoles se contabilizan 884 crímenes.
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