Paula Ruiz
Ocho diputados que fueron electros con el Partido Progreso Social Democrático (PPSD) presentaron este viernes un recurso de amparo electoral ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) contra dicha agrupación política.
Se trata de los legisladores Pilar Cisneros, Daniel Vargas, Waldo Agüero, Paola Nájera, Alexander Barrantes, Manuel Morales, Jorge Rojas y Ada Acuña.
La decisión de acudir al TSE surge después de la comunicación emitida por el PPSD a los correos electrónicos personales de dichos legisladores, así como al Directorio Legislativo. En el mensaje se informa de la expulsión de cada uno de ellos, de la organización política, confirmó Cisneros a este medio.
“Nos vulneraron todos los derechos porque a estas alturas, no hay ni expediente abierto en el Comité de Ética del partido, entonces eso por un lado y nunca se nos comunicó. Lo que se nos dijo fue que vengan para que rindan informe al Comité Ejecutivo sobre qué cuales son las acusaciones y nunca nos contestaron”, detalló la legisladora a El Observador.
Cisneros indicó que presentaron el recurso este viernes luego de esperar respuesta por un plazo de diez días, tras las consultas enviadas a las jerarquías del partido político.
La congresista defendió que el estatuto interno del PPSD indica que hay dos causales para expulsión: una condena penal o bien, que se hayan aprovechado del cargo para enriquecerse. Y, en este caso, no aplica ninguna de esas razones, según expuso.
El 9 de octubre, la diputada y presidenta de Progreso, Luz Mary Alpízar anunció la expulsión de los congresistas por una doble militancia. (Cortesía de Asamblea Legislativa)
Medida cautelar
La solicitud que realizan los legisladores al Tribunal es que se ordene frenar la expulsión como una medida cautelar, ante la ausencia del debido proceso, como argumentan.
“Los estatutos del partido no contemplan la supuesta renuncia tácita ni nada parecido para justificar la expulsión del partido”, destacó Cisneros a través de un comunicado que enviaron minutos después de conversar con este medio.
Esta acción de los diputados se suma a la denuncia presentada ante el mismo partido Progreso, en contra de Alpízar. El 12 de octubre, el grupo de congresistas dio a conocer esta acción interna en la que plantearon un recurso de apelación sobre la determinación de quitarles la militancia.
Además, denunciaron a Alpízar ante el Tribunal de Ética del PPSD.
Posición de la presidenta del partido
Luz Mary Alpízar, diputada y presidenta del PPSD emitió una declaración esta tarde y consideró como normal este tipo de reacciones ante el proceso que llevaron a cabo en la agrupación. De momento, esperará la respuesta del Tribunal Supremo de Elecciones.
En sus declaraciones, Alpízar usó la frase “excompañeros de la fracción del Partido Progreso Social Democrático” al hacer referencia a los ocho congresistas que plantearon el recurso.
“En el partido se siguió lo establecido por la resolución del tribunal para cuando se tiene que es público y notorio la voluntad de las personas de separarse del partido que fue lo que los compañeros ejecutaron hace más de dos meses”, declaró.
La expulsión
Progreso alegó que está aplicando una renuncia tácita de los diputados, al considerar que tienen una doble militancia. En julio, los legisladores se presentaron en un evento de la agrupación Aquí Costa Rica Manda.
Lo sustentan en las resoluciones 7255-E8-2023 y 2434-E8-2021 del TSE que habla del tema y que indican el procedimiento a seguir.
Entre otras acciones se “procede a comunicarle la separación y desafiliación al Partido Progreso Social Democrático. Lo anterior una vez que confirmó y acreditó las evidencias de los hechos atribuidos de la decisión de desligarse del partido Progreso Social Democrático por lo que aceptamos su renuncia tácita”.
Tras la expulsión, se solicitó al Directorio Legislativo declararlos como diputados independientes con lo cual, Alpízar quedaría como única diputada de Progreso.
Eso, implicaría que Pilar Cisneros deje de ser la jefa de fracción del PPSD y que pierdan privilegios como cantidad de asesores y posibilidad de hablar en Plenario.
El Directorio determinó que no tiene las potestades para tomar una decisión al respecto y el grupo de diputados ha descartado renuncia, pese a los constantes roces con el partido que los llevó a las curules y el apoyo a otra bandera para las elecciones municipales de febrero.
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