Paula Ruiz
La diputada oficialista oficialista Pilar Cisneros, consideró que la reforma constitucional que permitió al Gobierno iniciar sus funciones con el control de la agenda legislativa, pudo no ser del todo lo ideal.
Cisneros justificó que pese a la buena voluntad para presentar proyectos de ley, hay un trámite legislativo para cada iniciativa con un respectivo trámite en comisiones legislativas.
Lo anterior, con la excepción de un proyecto de altísimo consenso que permita una dispensa de trámite para ser visto directamente en Plenario.
“El Ejecutivo puede presentar excelentes proyectos que tiene que cumplir con el trámite. Yo no sé si fue tan buena idea empezar de una vez con extraordinarias porque cualquier Gobierno se va a enfrentar con esa traba”, defendió la oficialista.
Sobre este mismo tema, Fabricio Alvarado, jefe de fracción de Nueva República reconoció el esfuerzo del Poder Ejecutivo por acomodarse en sus respectivas labores y a la vez, dirigir la agenda.
“Quedará para futuros Gobiernos que hay que llegar más entendidos y preparados”, afirmó.
De forma contraria, el frenteamplista Jonathan Acuña consideró que la reforma aprobada en la legislatura anterior es importante.
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Achacó las sesiones atípicas a la toma de posesión de un mandatario posicionado a través de un partido político completamente nuevo.
“Y que no tenía agenda en la Asamblea y eso provoca que no tenga proyectos que ya previamente haya construido para convocar”, consideró.
Con anterioridad, Eli Feinzaig, jefe de fracción del Liberal Progresista (PLP), planteó que el verdadero problema está en que hay un lapso de dos meses entre primera y segunda ronda.
Luego de eso, solo le deja un mes al gobierno electo para nombrar gabinete, terminar los proyectos de ley propios y hacer análisis de los que ya están en la corriente, así como decretos ejecutivos.
“Un partido más maduro, hubiera tenido eso listo, en nuestro caso, veníamos trabajando en eso hace poco más de dos años y ya teníamos proyectos listos en caso de haber ganado la presidencia de la República, entiendo que Progreso Social Democrático no tuvo ese proceso, ganan las elecciones y no estaban preparados, ahora estamos pagando todos las consecuencias”, afirmó Feinzaig en ese momento.
Un freno legislativo
En varias ocasiones, la oposición ha insistido en la falta de una agenda robusta que le permita al Plenario y las comisiones legislativas, continuar su trabajo de análisis y votación de iniciativas.
“Hemos aprobado proyectos viejos, que no tienen mayor impacto, una cantidad importante que lo que creo es que se convierte en una cortina de humo para tapar que no hemos empezado con los temas trascendentales del país”, dijo la socialcristiana Vanessa Castro a TV Legislativa.
Los congresistas esperan que en el inicio de este segundo mes de gestiones desde el Poder Ejecutivo, se fije la ruta del Gobierno para avanzar desde el Congreso.
Diputados de oposición han reclamado en múltiples oportunidades, la falta de una agenda robusta.
