Hermes Solano
El robo de materiales a instituciones del Estado como el instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el Incofer o la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) dejó pérdidas millonarias en el 2021.
Cable telefónico, medidores de electricidad, líneas férreas y tornillos de las mismas líneas por donde pasa el tren son los materiales más apetecidos por la delincuencia.
Así lo dio a conocer el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), que en 2021 recibió 2.541 denuncias por este delito.
Esta falta la cometen delincuentes comunes, pero también bandas organizadas. Las autoridades judiciales son claras en que el daño que provocan estos hurtos va más allá de las piezas que se llevan.
Hay afectación en el sistema telefónico y de Internet en muchas de las zonas, que han generado crisis incluso en hospitales.
“El ICE es de las instituciones más afectadas con ese tema. Durante el año pasado las pérdidas económicas fueron de más de 5.000 millones de colones”, explicó Douglas Rodríguez, subjefe de la sección de hurtos del OIJ.
En todo el 2021 se robaron 88.000 metros de cable a lo largo y ancho del país.
Sobre la afectación de materiales y económica de Incofer y el CNFL, el OIJ no dio a conocer los datos.
Las tapas de las alcantarillas son también blanco de los delincuentes.
San José y Alajuela
La capital y Alajuela son las provincias donde se registraron más denuncias por este delito durante el año anterior.
Entre junio y agosto se presentaron la mayoría de casos, que fueron en aumento y lo que hizo que el OIJ comenzara a realizar operativos e investigación para controlar la situación.
“A raíz de ese incremento en las denuncias comenzamos a realizar operativos en conjunto con las municipalidades y los entes afectados y eso hizo que cerráramos en diciembre con 81 casos”, indicó el agente judicial.
Por ejemplo, en los sectores de Hatillo y Mata Redonda es donde se ha presentado mucho el robo de medidores de electricidad en las viviendas y comercios.
Esos medidores os desarman para quitarles una pieza de cobre que es la que buscan vender.
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A las chatarreras
Luego de que se da el robo de cable o de las tapas metálicas de alcantarillas, que también son de los preferidos por los delincuentes, van a chatarreras a venderlos.
Según el OIJ, actualmente el kilo de cobre se paga entre ¢4.000 y ¢4.500.
“Hay organizaciones de crimen organizado que se dedican a este flagelo, utilizando vestimenta similar a las de empleados del Estado”, dijo Rodríguez.
El OIJ ha intervenido las chatarreras y ha encontrado materiales que pertenecen al Estado, por lo que han intentado parar la situación con detenciones y de esa manera evitar que los delincuentes tengan donde comercializar el material robado.
Las autoridades piden a la población denunciar cuando son testigos del robo de materiales y no permitir que se siga presentando en el país.
