Giovanni Rodríguez para El Observador
Los avances tecnológicos indudablemente nos proporcionan más comodidad y seguridad, los teléfonos y aplicaciones cada vez son más rápidos y con mayor capacidad.
El montañismo, como actividad deportiva o de esparcimiento, también se ha visto influenciada por la tecnología.
Los relojes con GPS, contadores de calorías, altimetría y clima en fin una serie de datos e información vital para el disfrute del deporte.
En esta gama tecnológica nos encontramos apps que permiten “bajar” rutas y recorrerlas, estas aplicaciones ofrecen muchas ventajas como precisión distancia o altimetría.
Sin embargo, he visto que las personas que practican deportes al aire libre depositan su seguridad en estas aplicaciones y muchas veces no se cuestionan si tiene algún margen de error o bien que sucede si se pierde comunicación, o simplemente, se acaba la batería.
Aprender lo básico
Me gusta comparar esta dependencia con la tecnología con las personas que utilizan Excel sin saber los principios básicos de finanzas o contabilidad. Se pueden seguir los pasos para introducir cierta información en la fórmula, pero entender que pasa atrás de esa fórmula e interpretar datos es otro tema.
Por esa razón, si va a utilizar apps para navegar en montaña, lo primero que es recomendable es saber leer mapas, entender una brújula y saber medir curvas de nivel;aspectos básicos y sencillos que nos evitarán dolores de cabeza cuando falle la tecnología.
En la Universidad de Costa Rica (UCR) ofrecen cursos de verano sobre montañismo, donde de forma rápida y sencilla podrá aprender a leer mapas, curvas de nivel y la utilización adecuada de la brújula.
Giovanni Rodríguez es montañista con más de 100 ascensos al Chirripó y basta experiencia internacional en alta montaña. Ha liderado campañas y procesos de educación ambiental a nivel local y global.
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