Tomás Gómez
En un hecho inédito. El presidente de la República, Carlos Alvarado, dará su último informe de labores ante una Asamblea Legislativa que le es completamente ajena.
La rendición de cuentas la dará ante 57 diputados de oposición que asumieron el cargo el domingo. Por primera vez en dos décadas, el Partido Acción Ciudadana (PAC) estará ausente.
Tras dos periodos consecutivos en el Gobierno, el PAC fue castigado por los votantes y no recibió suficientes sufragios ni para el Poder Ejecutivo ni para el Legislativo.
En las elecciones de febrero la candidatura presidencial de Welmer Ramos apenas superó los 13.000 votos y se hundió hasta la décima posición. El resultado le llevó a perder todas las diputaciones.
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Así las cosas, esta será la primera ocasión -al menos durante la Segunda República- que un Presidente saliente no tendrá diputados afines en la nueva legislatura.
El PAC tendrá así un vacío en su defensa, pues según la normativa, una vez terminado el discurso presidencial le corresponde a las fracciones legislativas su réplica y análisis.
El debate, esta vez, será totalmente opositor a falta de representantes rojiamarillos que defiendan la gestión de su partido en Zapote.
Sobre el informe, semanas atrás el mandatario había adelantado que prepararía un documento breve y conciso que mostrara las reformas hechas en su período.
La última semana de Alvarado
El presidente Carlos Alvarado arranca con su informe la que será su última semana en el Poder.
Para el domingo al medio día está agendado el Traspaso de Poderes a la administración de Rodrigo Chaves.
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De momento no están agendados eventos particulares del Gobierno saliente.
Eso sí, para la semana restante, Zapote envió una lista de proyectos de ley donde pretende que se concentre la Asamblea Legislativa. El documento enlista más de 40 iniciativas que va de temas de como hidrógeno verde hasta la alfabetización digital, pasando por el polémico Acuerdo de Escazú.
El informe anual era de una de las ceremonias tradicionales de la política pero en los últimos dos años la pandemia mermó la asistencia y generó cambios al protocolo. (Cortesía Casa Presidencial)
