Desde la Columna
Por Luis Carlos Rojas, gerente Liberty Empresas
Esta época, este bendito siglo XXI en el que nos ha tocado vivir, es uno de las más emocionantes, extraños, riesgosos y vertiginosos a los que la humanidad se ha enfrentado desde su nacimiento.
La forma de relacionarnos está cambiando desde su concepto más básico ante el desarrollo de las nuevas tecnologías y desde los ámbitos científicos, tecnológicos y filosóficos. Se ha osado hasta proponer la definición de un nuevo ser humano.
Sin embargo, a pesar de esta tendencia orgullosa y devoradora que en muchas ocasiones se malentiende como evolución, existen axiomas en el poder de la humanidad que nos dan esperanza. Y nos guían a qué hacer aún en estos momentos en que todo parece incierto.
Uno de estos axiomas es el cuidarnos uno de otro, el entregarnos al servicio de los demás. A hacernos más fuertes en comunidad aprovechando las ventajas competitivas individuales y privadas de cada uno de los miembros para desechar la ley matemática de 1+1=2 y convertirla en 1+1= infinito.
Reciente compra que hizo Liberty
Así, en un mundo con tantas tecnologías emergentes, con tantas culturas distintas y una cantidad de humanos impresionante, se puede afirmar sin temor que el éxito como sociedad dependerá de nuestra capacidad de integración de las tecnologías y las comunicaciones.
Estas al final serán simplemente las facilitadoras de nuestra real necesidad: “el ser humano al servicio del otro” y no como se ha mal creído, que “la tecnología está al servicio del ser humano”.
Por lo anterior algunas compañías buscamos integrarnos con otras para ampliar nuestra red y poner a disposición de los clientes nuevos servicios.
Son servicios que, al final, faciliten la vida de los demás, mejoren la educación, la salud, el transporte. En suma: que nos sea más fácil interactuar con los demás y que cada uno pueda ponerse al servicio del otro de una manera más sencilla y amplia.
Este es el por qué de la compra de la cartera de clientes corporativos de Itellum que Liberty ha anunciado recientemente.
Es una buena noticia. Ahora muchas industrias podrán gozar de portafolios integrados de servicios. Por ejemplo la primera red IoT de Costa Rica, más de 9 Datacenters en la región.
Igualmente la capacidad de cable submarino y los mejores tiempos de retardo para acceder a Internet, aplicaciones en inteligencia artificial, así como de servicios específicos para hotelería.
Más todo esto con una visión de no ofrecer servicios empaquetados. Se trata de diseñar en conjunto con nuestros clientes y sus usuarios finales los servicios y precios que realmente se adapten a sus necesidades.
Queremos iniciar una nueva era de colaboración, estar al servicio de los demás y no solamente poner la tecnología a su disposición.
Liberty Empresas ha adoptado como visión, ser un socio de sus clientes en ámbitos que van más allá de la conectividad.
Estamos convencidos de que solamente en un ambiente de trabajo conjunto, y facilitando las herramientas para que nuestros clientes se pongan al servicio de los demás, es como se contribuye a una sociedad más justa. Pero también más humana y con un futuro no tan virtual, sino real y de bienestar… ¡sin miedo a la tecnología!
Desde la Columna
