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SugarMemories para El Observador
Se que a muchos les va a encantar la reseña de hoy y van a quedar tan enamorados del Pink latte así como yo. El fin de semana pasado nos fuimos a probar el brunch más rosado que puede existir, se van a sorprender de lo delicioso de cada uno de sus platillos.
Nos vinimos a Pink Bites en Plaza Tempo, Escazú, a probar no solo su famoso Pink latte sino que también teníamos que venir a probar los Pink pancakes y por supuesto algunos de los muffins que ya me habían recomendado.
Ya hace algunos meses había probado el menú de Bruch de Pink bites, pero tenia pendiente venir a probar los tan aclamados Pink pancakes que no solo son preciosos a la vista sino súper esponjosos.
Para empezar el brunch, nos pedimos el famoso Pink Latte, un café latte rosado sumamente fotogénico. También nos pedimos el bowl de huevos rancheros, y es que de verdad les digo que cuando vengan a Pink Bites no se pueden ir sin probar esta delicia de huevos.
La salsa de tomate en la que vienen bañados los huevos fritos es de otro nivel, sobrepasa las expectativas de una salsa de tomate natural, Mari la propietaria, nos menciona que es la receta secreta del papá, así que es una salsa de tomate con mucho amor.
Estos huevos rancheros vienen acompañados con un croissant justo para poder “dippear” en la salsa.
De segundo platillo teníamos que probar los famosos muffins, ya que me los habían recomendado, así que me fui por la opción del Pink roast beef muffin.
Estos muffins vienen con albahaca, hongos salteados, tomates cherry, roast beef, jamón de pavo y queso, lo mejor es que también traen la salsa de tomate de la casa ¡realmente una delicia! La combinación de sabores es un éxito, de verdad que estos muffins fueron de mis favoritos.
Y como el postre de brunch nunca puede faltar, claramente teníamos que pedir los Pink pancakes, tan solo vean la foto y confirmen ustedes mismo lo fotogénicos y lindos que son estos pancakes rosados.
Son 3 esponjosos pancakes bañados con miel de maple y acompañados con banano y fresas, les recomiendo pedirlos de ultimo, para que los puedan probar calientitos y así que la miel pueda ser super bien absorvida.
Pink Bites tienen una barra de lunch cakes espectacular, así que también pueden ir a visitarlos, probar el Pink latte y antojarse de alguno de los postres que siempre ofrecen en vitrina.
El brunch tuvo un 10 de 10 y el servicio siempre impecable, les recomiendo que vayan por esta delicia de brunch, tienen gran variedad de muffins, croissants dulces y salados, que definitivamente tengo que volver a probar.
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