Tomás Gómez
Los médicos especialistas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) concretaron sus advertencias y a partir de este lunes dejaron de trabajar horas extras y tiempos adicionales.
En las últimas semanas habían venido amenazando con la medida a la vez que pedían una revisión de las condiciones salariales, que se intentaron llevar a la mesa.
Incluso esta tarde se dio un encuentro en el Sindicato Nacional de Médicos Especialistas (Siname). En la cita se habrían negociado algunos temas que de momento permanecen en secreto y que están siendo analizados en una sesión confidencial de la Junta Directiva de la CCSS.
“Tras el encuentro de este lunes, las negociaciones entre el Siname y la CCSS entran ahora en un ‘impasse’ administrativo, ya que las gerencias no tienen la competencia de toma de decisiones sobre estos temas”, indicó el gremio.
De manera previa, la Caja había apuntado que salieron cinco propuestas enfocadas en las condiciones de trabajo y el salario.
“Estaremos esperando la decisión del órgano colegiado”, mencionó la gerente administrativa, Gabriela Artavia.
El “plan b” por el paro de especialistas
Como medida paliativa a un eventual cese de funciones de los especialistas, la CCSS avanzó durante Semana Santa una contratación des servicios privados de salud.
La previsión es que al no tener profesionales disponibles habría un “un riesgo a la continuidad de los servicios de salud que presta la CCSS, de lunes a jueves de 4 pm a 7 a.m., los viernes de 3 pm a 7 am y las 24 horas los sábados, domingos y feriados”.
En esos mismos plazos es que los centros contratados deberían recibir potenciales pacientes.
El trámite arrancó el martes y concluyó el sábado por la noche. Consta de un presupuesto de hasta .¢12.583 millones.
Las empresas que estarían dando los servicios pendientes son Mediluke S.A., Raque S.A., Asociación de Servicios Médicos Costarricenses, Hospital Universitario Unibe S.A. e Instituto Centroamericano de Medicina I.C.E.M S.A.
