Allan Arroyo
“Ha enriquecido la cultura científica costarricense, produciendo investigación de punta y tecnología”. Así, el jurado de los Premios Nacionales de Cultura justificó la decisión de entregar el Premio Magón 2022 al Dr. José María Gutiérrez.
Se trata del máximo reconocimiento de la Cultura, que otorga cada año el Estado Costarricense. En poco más de 60 años, es la quinta vez que se reconoce con el máximo galardón a una persona ligada a las ciencias.
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El Dr. Gutierrez es microbiólogo y químico de la Universidad de Costa Rica, además de doctor en Ciencias Fisiológicas por la Universidad de Oklahoma.
El catedrático universitario e investigador del Instituto Clodomiro Picado, con cuatro décadas de trabajo en sueros contra el veneno de serpientes, conversó con El Observador sobre el reconocimiento, pero con más detalle, abordó en la entrevista los retos de Costa Rica en áreas como las ciencias, impacto social y educación.
El Dr. Gutierres fue profesor catedrático de la Facultad de Microbiología, en cursos de grado y posgrado, e investigador del Instituto Clodomiro Picado (ICP), al que estuvo ligado desde que era estudiante de la Universidad de Costa Rica. (Cortesía UCR).
Ciencia y cultura
Con buen verbo y gran amabilidad, el científico costarricense agradeció la postulación, que reconoce lo tomó por sorpresa, al ser un premio de cultura que muy pocas veces es dado a personas de ciencia.
Ante las consultas de muchos, para él no hay duda de la relación que tienen ambas ramas.
“Muchas veces a la ciencia se le separa de cultura, lo cual es inconveniente desde todo punto de vista”.
Para el Dr. Gutierrez, la ciencia es una forma de comprender la realidad de diferentes ámbitos. “No es una recolección fría de datos, como muchas veces se le quiere hacer ver. Es una actividad meramente creativa, porque en esa observación y esa experimentación sobre la realidad, se generan hipótesis y concepciones sobre como funcionan los fenómenos nacionales y sociales”.
El galardonado con el Magón 2022 dice que es un reconocimiento para muchas personas, que por décadas dedican su trabajo a un proyecto país de salud pública, atendiendo las picaduras de serpientes con antídotos descubiertos y desarrollados en Costa Rica.
José María Gutierrez (derecha) ha publicado más de 500 trabajos científicos en revistas especializadas y libros. (Cortesía UCR).
Un impacto social desde las universidades
Los sueros antiofídicos que se producen en el Instituto Clodomiro Picado, de la Universidad de Costa Rica (UCR), salvan la vida de unos 600 pacientes en Costa Rica por año, quienes sufren picaduras de serpientes.
Pero además, desde suelo nacional y con sello tico, se exportan a países sudamericanos y hasta africanos, entre ellos: Nigeria, Burkina Faso, Mali, Etiopía, Sudán del Sur, entre otros.
Con el envío de unos 20.000 viales al año a África, se salvan cerca de 10.000 personas.
El experto lo explica como “una onda expansiva de sufrimiento social”. Las mordeduras de serpientes no solo causan la muerte, sino que afecta con mayor incidencia a poblaciones de escasos recursos, en zonas rurales, y puede provocar amputaciones e incapacidad, afectando la económica de los países y a lo interno de las familias.
Es por esto que el Dr. Gutierrez defiende el impacto y la fortaleza que tienen las entidades públicas costarricenses.
“Ha sido la autonomía universitaria, que dicho sea de paso, hoy está sufriendo hostigamientos por parte de algunos grupos o sectores políticos y económicos del país, es lo que ha permitido el desarrollo de un proyecto de este tipo, y por supuesto, ha sido el riquísimo sistema de salud pública costarricense, a través de la Caja Costarricense de Seguro Social y el Ministerio de Salud, que ha perdido que el conocimiento científico lleguen a la población costarricense”, defendió.
El Dr. Gutierrez recibió en 2020 el premio Rodrigo Facio, reconocimiento de la Universidad de Costa Rica, por su trabajo científico. (Cortesía UCR).
Ciencia sigue como cenicienta
Para el Dr. José María Gutierrez, como voz autorizada, Costa Rica da pasos en fortalecer áreas como ingenierías y tecnología, además de ir reduciendo la brecha de género en el ingreso a las carreras científicas, pero hay contradicciones.
“Hay un estímulo para que muchas personas jóvenes muy capaces, quieran desarrollarse en una vocación científica y dedicarse a la investigación y la ciencia, sin embargo el país no les ofrece a esas personas, luego, las oportunidades para insertarse profesionalmente. Algunas si lo tienen, pero otras personas no logran esa oportunidad,” explica.
El experimentado docente y formador de nuevos talentos, como también se le reconoce con el premio Magón, advierte que Costa Rica prepara profesionales de calidad, pero existe una “fuga de talentos” a otras naciones, perdiendo el aporte de profesionales valiosos.
Para él, es necesario mantener conectados y vinculados a esos científicos en el exterior, con el país, cuando no es posible adsorberlos en el mercado laboral local por las limitantes existentes.
“Todavía no creemos como país, en términos de voluntad política, que la ciencia sea un componente fundamental de nuestro proceso de desarrollo y eso debe cambiar en nuestra cultura política. Es decir, la ciencia sigue siendo una cenicienta en las actividades nacionales”.
El Dr. Gutierrez apunta algunas evidencias para respaldar el, todavía, poco interés que Costa Rica le da a las ciencias y la falta de oportunidades para los dedicados a la investigación:
- Solo 0.4% del Producto Interno Bruto (PIB) para investigación.
- Poca creación de plazas y espacios en el sector privado para jóvenes en ciencias.
- Poca inversión en innovación y desarrollo por parte de las empresas.
- Recortes al presupuesto de las universidades por razones políticas y fiscales.
Para el ganador del premio Magón 2022, una reforma en educación también es necesaria, además del apoyo y formación desde los hogares, para cambiar la cultura en torno a la ciencia y formar nuevos especialistas con oportunidades en Costa Rica.
“El país le está formando profesionales de altísima calidad a otras naciones,” advierte.
En la entrevista con este medio, el Dr. Gutierrez también resaltó la importancia de seguir formando profesionales con habilidades en otros tipos de ciencia, como las sociales. No dejar de lado ninguna rama.
La entrega oficial de los Premios Nacionales de Cultura será el 17 de mayo, en una ceremonia oficial.
