Mariana Mena
Luego de 38 años de trabajar en la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y ocho como directora del hospital Nacional de Niños, desde este viernes Olga Arguedas se jubila.
“Lo más difícil que me tocó enfrentar, como directora y médico, fue la pandemia de covid-19. Fue un desafió medico y de decisiones de los más difíciles para todos los que trabajamos en Salud”, indicó en entrevista con El Observador.
“Además, esto trajo una serie de retrasos para muchos proyectos y sueños que teníamos para este hospital, casi todos los recursos fueron destinados a la atención de esta emergencia”, agregó.
Para la doctora, hay una serie de retos que el hospital debe enfrentar, por ejemplo, la necesidad de infraestructura. Cada temporada de picos respiratorios el hospital sufre de saturaciones.
“Hemos visto un impacto en el programa quirúrgico, los niños que necesitan cirugías complejas, como la de corazón, salen de sala de operación a una UCI, pero si no hay espacio no se pueden realizar. La lista de espera es una deuda muy sensible que dejo”, lamentó Arguedas.
“También, después de la pandemia, vemos una marcada necesidad de recurso humano como enfermería y otras especialidades, que repercuten en la atención”, sumó.
El edificio principal, necesita mejoras importantes, desde cambios eléctricos hasta un refuerzo anti sísmico. De ahí, la necesidad de proyectos importantes como la Torre de la Esperanza.
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En el 2020, se presentó la idea de la Torre de la Esperanza tras conseguir los terrenos en la cuadra oeste del edificio principal. (Cortesía CCSS)
Desafío como mujer
También la doctora se convirtió en la primera mujer en ocupar la dirección del Hospital de Niños, un reto que la marcó y considera será de ejemplo para muchas niñas.
“Ser directora es una responsabilidad muy muy grande, y sin duda, ser mujer incluye un adicional. Tuve que demostrar y llenar las expectativas de quienes señalan el genero”, comentó.
“Pero salgo con una gran satisfacción, porque sé que esto es un ejemplo para mis colegas y las niñas que sueñan con ser doctoras, de que sí se puede lograr ocupar altas jerarquías”, recalcó Arguedas.
Según confirmó desde el año anterior tenia aprobada la jubilación, sin embargo, tomo ese tiempo para realizar todos los procesos de transición y dejar todo en orden para el próximo director.
De manera interina, va asumir el doctor Carlos Jiménez, subdirector del hospital. Hasta que la Junta Directiva de la CCSS, ratifique el nombramiento.
“Debo decir que el doctor es excelente y por derecho él ocupara el cargo, primero de manera interina”, confirmó la doctora.
“Ahora que me acojo a la jubilación, el sentimiento que más tengo es agradecimiento, con todo el equipo del hospital, que a pesar de la adversidad siempre ha estado trabajando en pro de los niños”, enfatizó.
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¿Qué sigue para la doctora?
“Sinceramente no sé (se ríe) quiero tomarme un tiempo para tener una introspección y meditar que quiero para esta otra etapa de mi vida. Como ciudadana quiero seguir aportando al país, pero si necesito un cambio de escenario en este momento”, aseguró.
De acuerdo con la doctora, tiene muchas aficiones como leer, el baile y otros ámbitos que se va a permitir explorar.
“Yo estoy mayor pero me siento saludable y con energía para seguir disfrutando y no descarto volver en algo de medicina”, finalizó.
Arguedas es pediatra inmunóloga, profesora de grado y posgrado de la Escuela de Medicina de la Universidad Costa Rica, ganó la Primera Medalla al Mérito Pediátrico Dr. Carlos Sáenz Herrera y fue directora del Centro de Desarrollo Estratégico en Salud y Seguridad Social (Cendeisss).
Quiero tomarme un tiempo para tener una introspección y meditar que quiero para esta otra etapa de mi vida. (Archivo/ElObservador)
