Redacción El Observador
(Ciudad de México). El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo este viernes que consultará con países de América Latina, en el Grupo de Río, si entrega la presidencia de la Alianza del Pacífico a Perú.
Obrador califica de “espurio” al gobierno de ese país.
“Le voy a dar instrucciones al secretario de Relaciones Exteriores que le notifique a los miembros del Grupo de Río qué hacemos, porque yo no quiero entregar a un gobierno que considero espurio. Que decidan los miembros del Grupo de Río”, dijo el mandatario durante su habitual rueda de prensa matutina.
“Lo vamos a notificar, a informar, para ver cuál es la opinión que tienen. Si ellos dicen ‘entreguen la presidencia’ lo hacemos, pero sí voy a hacer la consulta porque además yo no quiero legitimar un golpe de Estado”, añadió.
El Grupo de Río es un mecanismo regional permanente de consulta y concertación política que, además de México y Perú, incluye a Brasil, Argentina, Colombia, Panamá, Uruguay y Venezuela.
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Reclamo desde Perú
El miércoles, la presidenta peruana, Dina Boluarte, afirmó que México se niega a entregarle la jefatura de la Alianza del Pacífico porque López Obrador sigue apoyando al encarcelado expresidente Pedro Castillo.
Perú “debió asumir en enero la presidencia pro tempore” del bloque, pero ello no ocurrió debido a “esta situación política (en la) que el presidente de México está perjudicando a los pueblos que comprenden la Alianza del Pacífico”, conformada también por Chile y Colombia.
López Obrador ha expresado su apoyo al expresidente Castillo, quien el pasado 7 de diciembre, cuando estaba a punto de enfrentar una votación de destitución por el Congreso, anunció que disolvía el Parlamento y que gobernaría por decreto.
Pocas horas después, el Congreso lo destituyó y designó a Boluarte, entonces vicepresidenta, como mandataria constitucional.
Castillo fue detenido cuando intentaba llegar a la embajada de México, y un juez le dictó prisión preventiva de 18 meses por rebelión.
La destitución del expresidente desató una ola de protestas que han dejado al menos 48 muertos por la represión policial. Los manifestantes exigen la renuncia de Boluarte y nuevas elecciones generales.
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Costa Rica a la espera
Costa Rica esperaba comenzar el proceso de integración a este bloque comercial. La decisión la tomó el gobierno del presidente, Rodrigo Chaves, en un proceso que inició con Laura Chinchilla (2010-2014), pero que se paralizó en los dos gobiernos del partido Acción Ciudadana.
Chaves tenía previsto viajar a México o Perú, entre noviembre y diciembre, pero esas cumbres fueron canceladas.
Manuel Tovar, ministro de Comercio Exterior, explicó que una situación diplomática mantiene el impasse para nuestro país, debido a que desde enero, la presidencia pro témpore debía pasar a Perú.
Sin embargo, por choque de criterios entre México y Colombia este procedimiento todavía no se ha concretado.
“Esta situación genera un impasse en el marco de este bloque y no sabemos cuándo van: uno, a trasladar al presidencia pro témpore a Perú, que le corresponde desde enero. Y segundo: cuándo se activan los grupos de trabajo para la negociación de incorporación de Costa Rica y Ecuador”, explicó Tovar.
El plan inicial del Gobierno era iniciar las negociaciones a partir de enero y concluirlas en este año. Aunque ahora, el actual contexto afectará el cronograma programado.
Cuando se concrete la presidencia pro témpore, se continuará con las negociaciones y, luego, deberá remitirse el acuerdo a la Asamblea Legislativa para su ratificación.
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“Esto nos afecta un poco, pero esperamos que se puedan aclarar las cosas. En primer lugar por el bien de Perú que se restablezca la paz en este país y que vuelva a la normalidad en las relaciones diplomáticas entre los miembros del bloque”, puntualizó.
Desde que se anunció el plan de negociación, partidos como Nueva República (7 miembros) y Liberal Progresista (6) celebraron la intención.
Liberación Nacional, que tiene 19 votos clave, expuso por su parte un criterio divido. Si bien estaría respaldando la incorporación pide ajustes sobre todo en el tema agrícola.
“Liberación Nacional no permitirá más afectaciones y golpes al sector productivo nacional. Por lo cual la fracción estará anuente a las negociaciones para el ingreso a la Alianza del Pacífico”, comunicó la bancada en diciembre.
Con información de la agencia AFP
