Gustavo Martinez
Una nueva modalidad de estafa se está presentando en Costa Rica, por la cual los antisociales intentan extorsionar sus víctimas con llamadas intimidantes.
A la fecha, la Sección de Delitos Varios del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) reporta 26 casos en este año.
Así lo infirmó la Policía Judicial, este sábado, mediante un comunicado.
Etapas de la extorsión
Esta extorción inicia cuando los delincuentes caminan por las calles en busca de rótulos publicitarios de los locales comerciales con la intensión de ubicar números de telefónicos y nombres de eventuales víctimas.
Posterior a esto, llaman preguntando por las personas encargadas o dueñas de los establecimientos.
Una vez que los contactan, los estafadores les indican que han sido enviados a causarles algún daño o, incluso, la muerte, pero que desean llegar a algún acuerdo por lo que le solicitan dinero a cambio.
El jefe de la Sección de Delitos Varios del OIJ, Iván Rojas, indicó que los antisociales también disponen de las redes sociales para obtener la información personal de los ofendidos.
“Estos criminales también han detectado cierta facilidad para obtener por medio de redes sociales información sensible de personas que brindan, por ejemplo, servicios en algún local”, señaló Rojas.
“Lo que es utilizado por los delincuentes para determinar qué tipo de vivienda tienen, qué vehículo conduce o cuántas personas conforman el núcleo familiar. Datos que son usados para efectuar amenazas más directas, lo que acarrea para la víctima mayor inseguridad”, amplió el jefe policial.
Estas víctimas son escogidas al azar y las amenazas no son dirigidas a una persona en particular.
Ante estos casos, el OIJ recomienda a la población que lo más adecuado es bloquear a las personas en caso de recibir este tipo de llamadas.
Si los contactos continúan o se realiza algún pago extorsivo, las autoridades piden a la persona afectada presentar la denuncia correspondiente al OIJ.
