Sergio Arce
Pride Costa Rica, organización de la Marcha del Orgullo, reaccionó ante las diversas críticas que se han generado por el cambio de ruta de este año y por el cobro para la entrada a diversas actividades, entre ellas el concierto de cierre con Paulina Rubio.
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En redes sociales han aparecido duras críticas por parte de los llamados “Bloques Disidentes”, que están conformados por grupos o causas que no están de acuerdo con la logística de la Marcha de este año.
Uno de los cuestionamientos más fuertes que hacen estos grupos es porque la ruta de este 2022 no terminará en la Plaza de la Democracia, como ha sido la costumbre desde hace más de 10 años.
La Marcha -que tendrá lugar este domingo 26 a partir del mediodía- saldrá del Parque Central de San José y terminará en el Estadio Nacional, en La Sabana.
¿Por qué el cambio de ruta?
Mauricio Cantillo, uno de los integrantes de Pride Costa Rica, explicó a El Observador que el cambio de ruta responde a tres consideraciones.
La primera, dijo, es atender las inquietudes que las personas con discapacidad han hecho desde hace cuatro años. Cantillo indicó que ellos alegan que realizar la caminata en sentido oeste-este es más pesado que hacerla de este-oeste.
“Las personas con discapacidad, en especial las que han acudido sin ayuda de alguien más, deben hacer un mayor esfuerzo porque del Paseo Colón a la Avenida Segunda hay una pendiente que se les hace pesada”, indicó Cantillo.
El segundo elemento es porque la Plaza de la Democracia no cuenta con el suficiente espacio para recibir a las miles de personas que acuden a la Marcha.
“En el 2019, cuando vino Mónica Naranjo, acudieron más de 500.000 personas. Ahí es muy difícil darle cabida a tanta gente”, aseguró.
La tercera razón es porque “ir a contravía -con respecto al trazado de años pasados- es una forma de expresar nuestro malestar porque este gobierno no ha nombrado a la persona Comisionada Presidencial para Asuntos de la Población LGBTI”.
Esta figura la creó el anterior gobierno de Carlos Alvarado y la última persona en ocupar esta posición fue Jota Vargas Alvarado.
“Entiendo el malestar de la gente que quería manifestarse frente a la Asamblea Legislativa, dado que ha sido una tradición. El cambio de ruta nunca se pensó para desvalorizar esta lucha ni la causa”, acotó Cantillo.
El representante de Pride Costa Rica aseguró que se analizará más adelante la conveniencia o no se retomar la ruta original.
¿Por qué se cobrarán entradas?
Con respecto a las críticas que los “Bloques Disidentes” han hecho por el cobro de entradas para las actividades que tendrán lugar en el Estadio Nacional y su explanada desde este viernes 24 y hasta el domino 26, Cantillo manifestó que se hace “únicamente con el fin de pagar los gastos de logística”.
Entre estos gastos detalló: tarimas, proveedores, artistas nacionales, Estadio Nacional, ambulancias (para la Marcha y la feria) y pólizas de seguro.
Cantillo, sin embargo, hizo hincapié en que los recursos que se recauden con el cobro de entradas es para lograr un “fondo especial para ayudar a organizaciones sociales” que necesitan apoyo financiero.
Entre ellas mencionó a las que atienden a personas transgénero, con HIV o que han sido expulsadas de sus casas.
El representante adelantó que una vez se realicen las actividades de este fin de semana, se convocará a una asamblea general en la que la organización ofrecerá un informe de los ingresos y gastos.
Y con respecto al concierto de Paulina Rubio, él explicó que la presentación de la mexicana está a cargo de una empresa productora de conciertos. De hecho, es la misma que trajo a Costa Rica a Christian Nodal.
La artista -acotó Cantillo- cobra un monto y, además, se tiene que cancelar costos asociados a este espectáculo.
Denuncia de amenazas
Cantillo expresó que desde que trascendió el cambio de ruta los miembros de Pride Costa Rica han sido blanco de amenazas e insultos.
El representante de la organización se mostró a favor de que existan “voces adversas, porque Pride Costa Rica no es la única voz ni quiere monopolizar lo referente a la Marcha o las luchas a favor de la comunidad”.
“Pero se han recibido amenazas que incitan a la violencia y ese no es el objetivo. Las actividades de este año son una gran celebración para visibilizar los alcances, pero sin ignorar las luchas o derechos que se nos han invisibilizado”, subrayó.
