Tomás Gómez
El Juzgado Penal del II Circuito Judicial de San José dictó el sobreseimiento del exdiputado Otto Guevara en uno de los expedientes asociados a un supuesto tráfico de influencias a favor del importador de cemento chino, Juan Carlos Bolaños.
Guevara compartió la resolución donde se señala que el propio Ministerio Público pidió no seguir adelante con la investigación.
“La Fiscalía llegó a la conclusión, luego de ocho años de haber sido interpuesta la denuncia anónima que dio origen a esa causa penal, que yo no cometí ningún tipo de delito, y le solicitó al Juzgado Penal que cerrara mi caso”, apuntó.
“Termina de esta forma esta causa que nunca tuvo ni pies ni cabeza”, señaló.
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El político recriminó el actuar de la Fiscalía, pues según dijo, ya en una primera ocasión se había desestimado el caso.
De paso reclamó que el proceso implicó allanamientos dirigidos por la propia exfiscala Emilia Navas, así como una interceptación en vía pública que según él careció de autorización judicial.
“Allanamientos convenientemente realizados 9 semanas antes de la elección del 2018 en las que participaba como candidato presidencial”, sostuvo.
Guevara defiende su actuar
Según narró Guevara, su acción consistió en enviar dos cartas al Ministerio de Economía (MEIC) en 2014.
Estas tenían que ver con las barreras a la importación del cemento, que a su criterio encarecían el producto.
“A pesar de esa persecución y sus consecuencias, seguiré promoviendo el libre comercio, la competencia en todas las actividades económicas y todas las políticas públicas basadas en la filosofía de la libertad, sin temor a seguir enfrentando a los oligopolistas privados y sus tentáculos, así como a fiscales estatistas”, manifestó.
