Tomás Gómez
En política sí, pero no como candidato, ni con cargos.
Así pinta por ahora el futuro del alcalde de San José, Johnny Araya, quien el 1° de mayo dejará el cargo al que llegó desde 1991, primero como Ejecutivo municipal y con la breve ausencia de cuando fue candidato presidencial.
“Seguiré participando en política, lo he dicho en otros medios y en otros momentos, sigo siendo parte del Partido Liberación Nacional.”, dice.
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Sus preocupaciones las divide entre la agrupación y la condición de Costa Rica.
“Me parece que este país está muy complicado, Liberación tiene una gran reto de cara a las Elecciones del 2026, de poder presentar una figura que le devuelva la confianza, la credibilidad a los costarricenses”, afirmó.
“Yo quisiera ser parte de contribuir desde la posición en que esté; no con el Partido Liberación Nacional, sino con el país, como ciudadano ya no ocupando ningún cargo público”, aseveró.
Un currículum sin otra candidatura
Proveniente de una familia con alta tradición política, Araya debutó como regidor en el período 1982-1986. Por entonces era militante del izquierdista Movimiento Revolucionario del Pueblo.
Para inicios de la década de los 90 recibió el nombramiento de lo que entonces se llamaba “Ejecutivo municipal”. El cargo se convirtió en la alcaldía y a partir de ahí comenzó una larga carrera en el Municipio, tras ganar elecciones abiertas, cuyos resultados siempre lo favorecieron:
- 2002: ganó con el 36,4%
- 2006: subió al 68,9% de apoyo
- 2010: se mantuvo con 61,2%
- 2016: alcanzó el 40%
- 2020: logró el quinto período con 37,7%
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En el intermedio estuvieron un par de coqueteos con la Presidencia de la República.
En 2009 fue precandidato pero en la convención interna le ganó Laura Chinchilla y para 2014 sí llegó a la papeleta. No obstante, en medio de un panorama complicado optó por el retiro y abrió las puertas al primer gobierno del PAC.
¿Buscaría otra vez una candidatura?
La opción está descartada, asegura:
¿Fue buena idea frenar la reelección de alcaldes?
La larga trayectoria de Araya en la alcaldía lo convirtió en una de las caras más representativas del sector municipal.
Junto con Alfredo Córdoba, de San Carlos; Wilbert Aguilar, de Atenas; Gerardo Oviedo, de Guácimo y Pedro Rojas, de Sarapiquí llegaron al récord de haber ganado todas las elecciones locales que hasta el 2020 se habían celebrado en el país.
Para 2021, sin embargo, el escenario político varió. Una ley introdujo limitaciones a la reelección indefinida en los gobiernos locales y ahora permite solo sumar dos períodos consecutivos.
Araya ya no tuvo chance de ser candidato y ahora asegura que está por verse el efecto de la ley.
“Es un proyecto que solo el tiempo va a decir si fue bueno o fue mala”, concluyó.
