Josué Alvarado
Costa Rica es el país de Centroamérica y el Caribe que registra una mayor cantidad de hogares con sobreendeudamiento. Esto quiere decir que en dichos hogares se destina un 30% del presupuesto familiar o más para el pago de deudas.
En el país el 30,1% de los hogares tiene esta condición. Le siguen Belice con 24,5% y Panamá con 22,3%.
El promedio de sobreendeudamiento de la región llega a 18,8%, es decir, muy por debajo de las cifras que reporta Costa Rica.
Así se desprende de un informe elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), denominado “En búsqueda de mejores condiciones de endeudamiento para empresas y hogares”.
Sobreendeudamiento según las características
Otro de los hallazgos de dicho estudio es que el nivel de endeudamiento crece en aquellos sectores de la población que tienen menos recursos, lo que el banco relaciona con una falta de educación financiera.
Además, el porcentaje de hogares en Costa Rica con sobreendeudamiento es mayor cuando el jefe es un hombre o cuando la cabeza está desempleada.
Las familias extendidas suelen registrar menores niveles de sobreendeudamiento que las personas solteras y sin hijos, dice el informe del BID.
El director general de la Oficina del Consumidor Financiero (OCF), Danilo Montero, dijo a El Observador que esta cifra hogares con sobreendeudamiento podría ser mucho mayor, pues el BID no toma en cuesta los créditos "informales", como los que se ofrecen en las tiendas de electrodomésticos.
"Costa Rica es un país caro, mucho más caro que Panamá y El Salvador, uno diría entonces que tengo que endeudarme mucho más que un panameño o salvadoreño para comprarme un carro", señaló Montero.
El economista Gerardo Corrales destacó otro de los hallazgos del estudio: hay 760.000 personas que tienen créditos en dólares y ganan en colones, lo que les deja en un escenario de mucha incertidumbre por el riesgo cambiario.
Para Corrales es importante hacer este cambio para evitar la "exposición de las familias a las fluctuaciones cambiarias". Asimismo, consideró que la educación financiera es clave para salvaguardar el presupuesto d los hogares.
