Juan Pablo Arias
Hasta 900 pacientes de covid-19 necesitarán una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) a final de mayo, según el escenario más negativo que proyecta la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
De este total, un 67% llegarían a una cama UCI para atención de casos severos y el restante será catalogado como crítico.
El escenario más positivo también supone retos para la seguridad social del país. La proyección de la CCSS es que -en el mejor de lo casos- para final de mes unos 771 pacientes lleguen a una UCI; 523 severos y 248 en estado crítico.
Esta información es parte del informe “Situación Actual covid-19”, elaborado por la Unidad de Gestión de Información covid-19 de la CCSS y que fue compartido el sábado anterior con un grupo de empresarios y líderes religiosos durante una reunión virtual con autoridades de Gobierno.
Informe situación Actual Covid-19, CCSS; 7 de mayo de 2021. (Captura de pantalla)
No alcanzan las camas
El viernes pasado, 7 de mayo, se registró un total de 418 pacientes haciendo uso de una cama de cuidado intensivo en la CCSS, cifra que supera la meta fijada por la institución.
Previamente, desde el 27 de abril pasado se había superado la meta Institucional de 359 camas habilitadas para cuidados intensivos de covid-19.
“Es importante hacer de su conocimiento que, a partir del momento en que se supera la cantidad de camas establecidas en esta categoría, todo esfuerzo es extraordinario y está centrado en evitar que ningún paciente se quede sin una cama”, cita el oficio GG-1400-2021 dirigido por las gerencias de la CCSS a su presidente ejecutivo, Román Macaya.
Como consecuencia de ello, afirman los ocho gerentes firmantes, la atención óptima a los pacientes se está viendo comprometida, debido al inevitable reto que representa en aspectos como el recurso humano.
Informe situación Actual Covid-19, CCSS; 7 de mayo de 2021. (Captura de pantalla)
La razón es que algunos perfiles profesionales ya no son posibles de contratar y existe presión sobre los inventarios de insumos, por la alta demanda de equipo de protección personal, medicamentos y equipo médico.
“Es imperioso tomar en cuenta que la situación que enfrenta la India, que es uno de los principales productores de bienes necesarios para enfrentar la pandemia, puede a corto o mediano plazo generar un impacto global que nos alcance como país”, agregaron.
Capacidad insuficiente
En el mismo oficio de los gerentes, se asegura que durante el 2020 el Seguro de Salud tuvo un impacto total negativo de ¢345.885 millones.
Advierten que en tanto no se modifique el comportamiento en la propagación del virus y las dinámicas sociales que la impulsan, “la capacidad instalada institucional no va a poder satisfacer la demanda”.
El mismo oficio destaca que en 80 años de historia de la Caja, nunca se había tenido más de 1.000 pacientes hospitalizados por una misma enfermedad y de ahí la preocupación sobre la atención que se pueda brindar a final de mes.
“Desde el 27 de abril 2021, fecha en la que la cantidad de camas habilitadas de cuidados intensivos rebasó el límite previamente establecido en virtud de la capacidad instalada y el recurso humano con que cuenta la institución, el riesgo de no ofrecer una atención óptima a los pacientes tanto covid como no- covid es inminente”, resume el documento.
En palabras de los gerentes, el Sistema de Salud Pública en Costa Rica se encuentra en un escenario de saturación hospitalaria.
