Allan Arroyo
El Tribunal Penal de San José absolvió de toda pena y responsabilidad al sacerdote de apellidos Brenes Villalobos, quien fue acusado de abandonar a su sobrino de 6 años en el desierto de Arizona, Estados Unidos.
El caso se remonta a junio de 2018.
Defendió el acto
En el proceso de juicio, la defensa del imputado de 51 años aseguró que la intención no fue abandonarlo, sino que el menor pudiera reencontrarse con su madre.
La fiscalía había pedido 8 años de cárcel, mientras el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) 10 años por tráfico de migrantes y abandono de incapaz.
Recuento del caso
El implicado en este proceso salió con su sobrino vía aérea a México. Luego se trasladó a Hermosillo, Sonora, a 287 kilómetros de la frontera entre ese país y Estados Unidos. Una vez en el lugar, el menor fue dejado en el desierto.
Tres días más tarde, agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. encontraron al niño solo, sentado en una roca con una nota que decía “voy buscando a mi mamá”. La temperatura era entonces de 38 ℃.
Las presuntas coordinaciones del imputado se dieron para que el niño llegara a Estados Unidos, donde permanecía su madre. En aquella oportunidad, el Consulado de Costa Rica en Nueva York contactó a la madre del menor para entregarle al niño.
El sacedote fue detenido en noviembre de 2019, por este sonado caso que fue noticia en medios de comunicación de Estados Unidos.
La oficina de prensa de la Diócesis de Tilarán-Liberia aclaró que “El padre Hugo Brenes, sigue como sacerdote, esto no ha cambiado nunca, solo fue relevado de su función como párroco, en Sardinal, cuando se presentó este caso, a fin de que se concentrara en su defensa legal”.
Avanzado el proceso, se espera un nuevo pronunciamiento de las autoridades eclesiásticas sobre este tema.
