Tomás Gómez
En media hora de conferencia, la hasta este martes gerente general del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), Hazel Cepeda, defendió su gestión, criticó cambios en la institución y alertó sobre riesgo de los ajustes que han estado haciendo las autoridades.
Cepeda cuestionó el por qué de los cambios si se venían obteniendo, a su parecer, resultados positivos.
Al respecto, describió que desde el ajuste en las jefaturas, el presidente ejecutivo, Marco Acuña, nunca atendió una reunión. Esto a pesar de que solicitó un número importante de informes.
Su destitución, insinuó la exgerente, es coincidente con la suspensión de tres directivas que dictó la semana pasada el Consejo de Gobierno. Explicó que esa decisión alteró los pesos y contrapesos que había en la institución.
En ese sentido, advirtió que se debe prestar atención a posibles acciones que surjan, ya que, el Consejo Directivo quedó reconfigurado temporalmente por los sustitutos designados por el actual Gobierno.
Cepeda recalcó que aún está por definirse la validez sobre las destituciones ejecutadas recientemente, tomando en cuenta los reclamos jurídicos interpuestos en las últimas horas.
Durante su exposición ante la prensa, la ex gerente general del ICE solicitó que se mantengan abiertas las investigaciones que analizan posibles irregularidades dentro de la entidad, las cuales derivaron al menos 26 medidas cautelares.
El riesgo principal para el ICE
La destitución de Cepeda se votó el martes por la noche y se hizo efectiva este mismo miércoles.
El comunicado oficial del ICE señala que la decisión se tomó porque se buscaba a alguien de confianza, lo que a criterio de la gerente saliente “deslegitima su trabajo técnico”.
Tras defender la gestión financiera que se hizo, ella adelantó que con los cambios que se están dando se podría afectar la imagen y confianza de la institución ante los acreedores e inversionistas.
