Tomás Gómez
¿Se imagina entrar al Registro Civil y darse cuenta que se casó con una persona a la que nunca ha visto?
Esa realidad golpea a decenas de personas cada año, quienes terminan legalmente dentro de matrimonios con desconocidos o con quienes no es posible la unión.
El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) indicó en su Informe Anual de Labores que solo el año pasado fueron necesarias medio centenar de intervenciones.
“El TSE ha venido realizando esfuerzos en aras de poner a disposición de las personas costarricenses afectadas por matrimonios nulos o inexistentes un mecanismo que les permita recuperar el estado civil que ostentaban antes de darse el supuesto matrimonio ilegal, fuera aquel soltería, viudez o divorcio”, indicó la institución.
“Con ese objetivo, durante 2022 se presentó ante la Procuraduría General de la República un total de 50 denuncias y una ante el Ministerio Público por presuntos matrimonios nulos o inexistentes”, sumó.
El reclamo, eso sí, necesita de una sentencia judicial. Una vez en firme, se procede a actualizar las bases de datos.
Un año de datos civiles
El informe del TSE abarca también el resumen de “hechos vitales” del 2022 ante el Registro Civil.
Estos abarcan todos los datos asociados a la existencia de las personas y sus derechos, incluyendo:
- Hubo 56.993 nacimientos y 29.771 muertes.
- Se registraron 23.885 matrimonios: de ellos 18.067 fueron civiles, 4.948 católicos y 870 se dieron en el extranjero.
- 13.236 parejas concretaron su divorcio
- 5.493 personas nacidas en el exterior completaron su naturalización como costarricenses.
- Se tramitaron 1.752 pruebas de paternidad: 1.293 resultaron positivos y 459 salieron negativas.
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