Josué Alvarado
La Junta Directiva del Consejo Nacional de Producción (CNP) aprobó una reforma que permite al sector industrial de Costa Rica importar alcohol.
Esta era una posibilidad con la que ya contaban empresas ligadas a la producción de licor.
Sin embargo, ante la imposibilidad de Fanal de abastecer a la industria del país por debido a los límites que le establece la regla fiscal, se amplió la opción de importar alcohol para otras tareas, entre ellas desinfección y esterilización de equipos.
Para ello la junta directiva aprobó de forma unánime, el pasado 16 de febrero, una reforma el Artículo 50 del Reglamento de Comercialización de Productos de Fanal.
En adelante, el artículo dice que en caso de que que la Fábrica Nacional de Licores no pueda suplir los requerimientos del mercado en cuanto a cantidad o calidad de alcohol, la Junta Directiva permitirá la importación.
El traslado se podrá hacer “según las condiciones de plazo, el tipo de alcohol y la cantidad en que no se tenga disponible y según los requerimientos que se consideren necesarios en dicho momento”.
El CNP calcula que para este año no podrá suplir la necesidad de 3 millones de litros de alcohol del sector industrial del país.
Esto debido a que la regla fiscal (que limita el gasto de las instituciones públicas) no permitirá a la Fanal adquirir suficiente materia prima a las azucareras de Costa Rica.
De esta forma, lo primero que abastecerá es a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y la producción de sus licores.
Los dos años anteriores el CNP estuvo excluido de la regla fiscal, según una excepción que se había habilitado durante la pandemia.
Reforma se hizo velozmente
El 25 de enero anterior, el administrador general de la Fanal, Jesús Ulloa, envió un oficio al presidente ejecutivo del CNP en el que pedía ampliar la posibilidad de importación de alcohol a otras empresas.
El 6 de febrero, Ulloa amplía su petición y solicitó que además, se debe de redactar que se cobrará un canon del 3% sobre el valor de la compra.
En la sesión de Junta Directiva del 16 de febrero, tres semanas después, los directivos aprobaron de forma unánime dicho cambio.
Estuvieron presentes el viceministro de Agricultura y Ganadería, Julián Arias y el presidente del CNP, Adolfo Ramírez.
También el representante de la Unión de Pequeños Productores Agropecuarios Costarricenses (Upa Nacional), Juan Rodríguez y el representante de organizaciones de pequeños productores agropecuarios, Carlos Solís.
Durante esta sesión no participó el representante del sector cooperativo, Rafael Herrera ni el presidente del Instituto de Desarrollo Rural (Inder), Osvaldo Artavia.
“La solución menos dañina para el monopolio”
La directora de Asuntos Jurídicos del CNP, Silvia Sibaja, indicó ante la Junta Directiva que debido esta realidad se habían buscado distintas opciones para poder abastecer al mercado nacional.
Según indicó, se llegó a la posibilidad de hacer esta reforma mientras buscaban “una solución que fuera lo menos grosera (para el monopolio)”.
Por otro lado, explicó que lo que ocurre actualmente no es desabasto. Es decir, hay materia prima en el país y Fanal podría procesarla, sin embargo, la regla fiscal impide que compren la material prima necesaria para producir lo que requieren las empresas.
“Es una solución, no es la mejor pero es la que es menos dañina al monopolio”, comentó Sibaja en la sesión del 16 de febrero. Añadió que esta medida “es incómoda a la luz del monopolio”.
Por su parte, el presidente del CNP, Adolfo Ramírez, adelantó que esta determinación se traducirá en menos ingresos para la fábrica.
“Al final, dependemos de lo que vendemos y cuando uno vende menos el riesgo a nivel administrativo operativo es mucho más fuerte, entonces eso también repercute dentro del costo administrativo institucional”, dijo Ramírez.
En Costa Rica, la producción y comercialización de alcohol está en manos de una única empresa: la estatal Fanal. Esto también impide que las compañías puedan comprar la materia prima a las azucareras del país agrupadas en Laica para producir su propio alcohol.
Fanal debe ser siempre quien esté de por medio.
Al ser el único proveedor, reconocer que no tendrá recurso suficientes y al tener que atender la regla fiscal, la Junta Directiva optó por permitir la importación.
“Contrario a la realidad del comercio”
El presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), Enrique Egloff, mantiene su posición en contra del monopolio pese a estos cambios anunciados.
El presidente del CNP comentó que si bien se le abre la puerta a las empresas para que puedan traer alcohol esto podría significar mayores gastos para ellas.
Egloff dice que en el país tiene quien supla el alcohol, sin embargo, enfatizó que el “sistema obsoleto” del monopolio les coloca en esta situación desventajosa.
Además, manifestó que el sector empresarial le da múltiples usos al alcohol durante su operación diaria:
- Producción de alimentos y bebidas
- Base de productos de limpieza, cosméticos, medicamentos
- Formulación de agroquímicos
- Equipos médicos de alta tecnología
- Buenas prácticas de inocuidad e higiene
“Un monopolio que limite y controle el acceso a materia prima e insumos que requiere el sector industrial en sus procesos productivos es contrario a la realidad del comercio, hace al país menos competitivo y pone en riesgo la continuidad de las cadenas de suministro y el funcionamiento de las empresas que deciden operar en el país”, señaló Egloff ante la consulta de este medio.
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo de la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (Cacia), Mario Montero, calificó como positiva la reforma.
Además, señaló que como conglomerado empresarial le habían alertado a Fanal sobre la posibilidad de que la falta de alcohol significara la paralización de las operaciones.
“Al país le urge un proceso con carácter de urgencia de la apertura de la competencia y la libertad que necesitan los usuarios costarricenses”, apuntó.
Agregó que el siguiente paso es paso es permitir que las empresas puedan también comprar directamente a los productores nacionales.
