Sergio Arce
Costa Rica cuenta con dos nuevas especies endémicas de plantas, cuyos hallazgos aparecieron publicados -casi que simultáneamente- en dos prestigiosas publicaciones internacionales.
Los descubrimientos se hicieron en la isla del Coco y en Guanacaste, según informó el Museo Nacional.
Esto porque Alexander Rodríguez, especialista responsable -junto con un equipo interdisciplinario- labora en esta dependencia de Ministerio de Cultura.
“Ambas investigaciones fueron independientes, sin embargo, de forma casual, se publicaron en revistas científicas con pocos días de diferencia.
“Este es el requisito final que cumplen las nuevas especies para ser reconocidas como tales”, explicó el botánico.
Stenospermation coquese es endémica de la Isla del Coco. Entretanto, Ilex hamelii es la que se descubrió en Guanacaste tras un trabajo de años.
La primera planta salió publicada en Anales del Jardín Botánico de Madrid y la segunda en Phytoneuron.
Desde tierras insulares
La nueva especie se logró recolectar gracias al trabajo colaborativo con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
Pero también a la experiencia que tienen los guardaparques Diego Madrigal, Guillermo Blanco y Jonathan Loría, destacados en la isla del Coco. También participaron los expertos Marco Cedeño, de Costa Rica, y Orlando Ortiz de Panamá.
Se trata de una planta del género Sternospemation, que pertenece a la familia arácea. A este última también corresponden especies como el tiquizque y ñampí.
Los guardaparques que recolectaron la especie Stenospermation aseguran que esta planta está presente en una pequeña porción de la isla (Cortesía Museo Nacional).
Igualmente plantas ornamentales como Anthurium y Monstera, conocidas popularmente como “anturios” y “mano de tigre”.
Sternospemation es el nombre ya dado al género y coques es el epíteto que los científicos le dieron a la especie en busca de rescatar uno de los primeros nombres que tuvo la isla.
Los guardaparques que la recolectaron aseguran que esta planta está presente en una pequeña porción de la isla.
“Es muy puntual su ubicación y hay pocos individuos, con una distribución muy delimitada, lo que la hace muy vulnerable”, agregó el botánico del Museo Nacional.
El género Stenospermation está compuesto por 50 especies herbáceas que se distribuyen desde Guatemala hasta Bolivia y Brasil. Siete de estas se encuentran en Costa Rica y hay especies epífitas que crecen sobre troncos o ramas.
Un largo estudio: Ilex hammelii
Un estudio independiente al realizado en la isla del Coco formalizó un nombre para una nueva especie: Ilex hammelii.
Se trata de una especie endémica de las cordilleras de Guanacaste y Tilarán y que se ha registrado entre los 900 a 1.600 m.s.n.m.
“Ejemplares de esta planta se venían recolectando desde hace algún tiempo, pero no se había registrado con un nombre hasta ahora”, explicó Rodríguez.
Ilex pertenece a la familia Aquifoliacea, la misma a la que pertenece “la yerba mate” (Ilex paraguariensis). Se trata de una planta cuyas hojas son muy populares en Sudamérica en la producción de té.
Ilex hamelii es la que se descubrió en Guanacaste tras un trabajo de años (Cortesía Museo Nacional).
“Es un género muy complejo y diverso, tiene más de 650 especies en todo el mundo, distribuido en Asia, Europa, América del Norte, América Central, América del Sur y Antillas.
“Por eso, definir una especie nueva en un género tan amplio es muy complejo, pues se tiene que descartar que no corresponde con alguna de estas ya publicadas”, agregó el botánico.
En Costa Rica hay cerca de 14 especies perteneciente a la familia del Ilex y, en este caso, Ilex hammelii se propuso como especie nueva.
Esto porque tiene una característica única: los tricomas o comúnmente llamados “pelos” que recubren algunas partes de la planta son de tipo estrellado.
“Al profundizar en este grupo, la literatura reporta hasta ahora solo una especie con este tipo de tricoma proveniente de Panamá. Sin embargo, con características y cualidades muy diferentes a la costarricense, lo que descarta que sean la misma”, añadió.
¿Cómo se define que una especie es nueva?
Profesionales en taxonomía son quienes generalmente llegan a determinar que una planta es una nueva especie para la ciencia.
Según explicó Rodríguez, generalmente los taxónomos tienen un reservorio suficiente de conocimiento que les permite, como primer paso, intuir la rareza de una especie.
El segundo paso es comparar con otras especies ya registradas en el país mediante el uso de herbarios nacionales y la revisión de la literatura científica local.
Al superar el paso dos y concluir que la especie no se ha registrado en el país, se procede con un tercer paso que podría resultar en una investigación más profunda y detallada.
Se examina literatura especializada que se relaciona con la identificación de la especie en estudio y se determina a qué otras especies podría estar relacionada.
También se compara con imágenes o especímenes de esas especies afines, sus características morfológicas y muchas veces ecológicas y se determinan sus diferencias o semejanzas.
Con base en lo anterior, el profesional en taxonomía concluye si la especie en estudio es nueva para la ciencia o corresponde con alguna ya reportada en otra región fuera del país.
Un proceso de estos puede llevar poco tiempo cuando hay pocas especies, o muchos años en casos de familias más complejas, tal y como fue el caso de Ilex, con una amplia distribución a nivel mundial.
