Paula Ruiz
Los diputados externaron este martes en Plenario su oposición a las declaraciones que hizo el lunes el Presidente de la República, Rodrigo Chaves, quien les exigió la aprobación de una autorización para emitir bonos de deuda externa (eurobonos).
En el marco de las celebraciones por un año más de la Anexión del Partido de Nicoya a Costa Rica, Chaves les pidió a los legisladores que dejaran de “jugar chapitas” y aprobara el proyecto de ley.
Más tarde, el mandatario se disculpó parcialmente con un tuit.
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El 26 de enero de 2023 el país debe cancelar alrededor de ¢1.000 millones de vencimientos de deuda. De allí la urgencia del Presidente.
Reacciones agrias
Lo dicho por Chaves en Guanacaste no cayó nada bien en el Primer Poder de la República. Allí consideran que el mandatario pudo dinamitar los puentes entre el Poder Legislativo y Ejecutivo.
Eli Feinzaig, jefe de fracción del Partido Liberal Progresista (PLP), aseguró que su bancada solo autorizará $1.500 millones.
La cifra es muy lejana de la totalidad de $14.000 millones pretendidos por el Gobierno en el proyecto de ley heredado de la administración de Carlos Alvarado.
También están lejos de los $6.000 millones que, como mínimo, estarían dispuestos a negociar en el Ejecutivo.
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Feinzaig destacó que el PLP se enfila a los $1.500 millones para pagar los vencimientos de enero y junio de 2023.
“Luego, sentémonos a negociar los otros $4.500 millones con métricas claras”, enfatizó.
Para el liberal es fundamental que el Gobierno muestre la ruta a seguir para reducir el gasto público, ya que las señales dadas hasta este momento son contrarias.
El diputado enlistó el Decreto Ejecutivo que “relaja” la aplicación de la regla fiscal. Esto implica aumentar el gasto en ¢400.000 millones, así como la autorización para crear 12.500 plazas en la CCSS hacia el largo plazo.
Además, recordó que el Gobierno pidió levantar la restricción para usar plazas congeladas lo cual se frenó en la Comisión de Asuntos Hacendarios del Congreso.
En esta misma línea, Óscar Izquierdo, subjefe de fracción de Liberación Nacional (PLN), planteó la urgencia sobre la presentación de un plan de reducción del gasto público para apoyar los eurobonos.
En tanto, Kattia Rivera, vocera del PLN, criticó vehementemente a Chaves por sus calificativos del lunes.
“No señor Presidente, no estamos aquí para aceptar que simplemente usted nos ponga subtítulos y entrecomillas. Estamos aquí para construir por el país”, dijo.
Por otra parte, la bancada de la Unidad Social Cristiana (PUSC) ya había anunciado su apoyo a eurobonos, siempre y cuando sea una autorización por $1.500 millones anuales.
Eso sí, la fracción no ha definido el monto total al que estaría de acuerdo. Lo que sí tiene claro es que habrá de por medio una condición de debida fiscalización, en la que el Estado emita informes por cada desembolso.
“Hay que cuidar las formas”
Pilar Cisneros, jefa de fracción del oficialismo, aceptó que el calificativo de Chaves pudo haber estado pasado de tono, aunque lo minimizó.
“Las formas cuentan y si dependemos un Poder del otro, hay que cuidar las formas. Tal vez, el señor presidente se excedió en la forma. Pero aquí lo que estamos discutiendo es el fondo: cuánto nos va a costar pagar esa deuda.. y cuanto más cara, necesitamos más impuestos para pagarla”, afirmó.
De acuerdo con la legisladora, en los próximos cinco años hay que pagar ¢7.700 millones en vencimientos.
“Si logramos colocar pronto y a largo plazo, vamos a poder liberar ¢1.000 millones de millones; es decir, un billón de colones en cuatro años con los cuales podemos hacer carreteras, hospitales, escuelas y colegios”, defendió la oficialista.
Cisneros criticó que la deuda aumentó en las últimas cuatro administraciones lideradas por el PLN y el PAC.
Pilar Cisneros defendió al Poder Ejecutivo pese a las declaraciones de Chaves que no cayeron nada bien en el Congreso. (Archivo/El Observador)
