Tomás Gómez
Los diputados advierten que seguirán tomando acciones luego de la polémica por la recolección de datos privados de los estudiantes y sus familias durante las pruebas FARO, el viernes anterior.
El plan era presentar una moción de censura este lunes contra la ministra Guiselle Cruz, pero esta renunció la noche del domingo.
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Legisladores de diversas bancadas advierten, eso sí, que la salida de la titular no da el tema por zanjado y advierten que seguirán las acciones.
Reacciones y advertencias
“Era insostenible pensar que la Ministra de Educación pudiese mantenerse en el cargo luego que se revelara el polémico cuestionario”, dijo la jefa de Liberación Nacional, María José Corrales.
Según ella el Gobierno ha sido reiterativo en acciones cuestionables para acceder a datos sensibles.
“La renuncia es un paso necesario pero jamás debe interpretarse como una resolución del tema. Al contrario, existen muchas dudas e interrogantes sobre las verdaderas intenciones del Gobierno”, agregó.
El líder socialcristiano Pablo Heriberto Abarca destacó, por su parte, que si bien la Ministra asumió la responsabilidad política, aún hay que ver la parte técnica, así como otras responsabilidades en el Ministerio.
“Queda pendiente la responsabilidad administrativa y obviamente la rendición de cuentas en el tema. Todavía hay muchas preguntas sin contestar”, manifestó.
La subjefa de Restauración, Mileidy Alvarado, destacó que “el daño ya está hecho”. “Esto no tapa el grave error cometido”, mencionó.
Jonathan Prendas, de Nueva República, enfiló sus críticas hacia el propio presidente Carlos Alvarado por desearle éxitos a la ministra saliente.
“Evidencia que nos le pesa en lo más mínimo lo sucedido. Las pruebas FARO son una falta gravísima que no vamos a pasar por alto y que no dejaremos que quede en la impunidad”, afirmó.
Otra que aprovechó para señalar a otros jerarcas fue la ahora independiente Paola Vega.
A su criterio, la salida era “lo correcto y lo que debió haber hecho Méndez Mata con el tema Cochinilla hace mucho también”.
En la moción de censura contra la Ministra Guiselle Cruz estuvieron involucrados Liberación Nacional, Unidad Socia Cristiana, Nueva República y diputados independientes como Dragos Dolanescu y Erick Rodríguez (Cortesía)
Escándalo de FARO provoca tres bajas
La semana anterior se desarrollaron las pruebas FARO de español, matemática y ciencias. Además, el MEP incluyó un cuarto formulario denominado “Cuestionario de Factores Asociados”.
Su desarrollo se dio el viernes y abarcó más de 600 preguntas que tomó a los niños más de 4 horas completar.
Desde ese momento las redes sociales comenzaron a dar cuenta de la molestia de los padres de familia.
Ese día en horas de la noche el MEP publicó un pronunciamiento de la viceministra, Melania Brenes, en el que se insistía en las bondades de la prueba.
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Ella aseguró que los datos se cruzarían con las notas y culpó a la pandemia por el atraso de los niños al completar las pruebas.
Veinticuatro horas después y con una creciente ola de críticas le tocó el turno de dar la cara a la ministra Cruz, quien más bien habló de “errores” y pidió eliminar los formularios.
Ambas jerarcas optaron por renunciar este domingo.
También había renunciado el sábado el Director de Gestión y Evaluación de la Calidad, Pablo Mena, que lideró el proceso FARO.
La viceministra Melania Brenes sustituyó a la ministra Cruz en varias ocasiones. Ambas renunciaron este domingo (Cortesía)
Las preguntas
Ante la cantidad de información que circuló, El Observador comparte los apartados del examen en cuestión.
En ellos se pidió a niños de 11 años que contestaran preguntas como, por ejemplo, qué expectativa tiene su familia de ellos o de cuál material es el techo de su casa.
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El formulario tiene la más diversa lista de preguntas, muchas de las cuales hacen énfasis en los bienes que tienen las familias.
Así, se pide dar detalles de las casas y su entorno:
A ello se sumaban interrogantes sobre las áreas verdes, para luego dar paso a una encuesta sobre electrodomésticos, medios de transporte y agregados.
Lo que piensa la familia
Como complemento, el cuestionario indaga en cómo se vivió el año académico de la pandemia en las casas.
Para ello profundiza en detalles de la participación de los padres y de cómo los hijos creen que son percibidos.
A los niños también les preguntaron si fueron a preescolar, la edad que tenían cuando empezaron a estudiar y si trabajan.
Ahí preguntaron también por los tipos de internet que tenía cada estudiante.
Incluso luego los pusieron a medir sus emociones, contar cómo estudian y hasta qué hacen en su tiempo libre.
Acompañado de este formulario, además cada niño debió llenar uno por cada materia. Allí se le preguntaba por la metodología de estudio, materiales dados por los docentes y más.
Según el MEP, cerca de 77.000 infantes pasaron por la prueba. De ellos, 7.000 lo hicieron en escuelas privadas.
